En verano toca sacar el bañador para pasar un bonito día en la playa o la piscina, pero para muchas personas, en especial para las mujeres, enseñar su cuerpo puede convertirse en un impedimento a la hora de disfrutar del momento. Los cánones de belleza marcan cuáles son los atractivos y censuran expresiones naturales de la piel, como la celulitis o las estrías.
La celulitis es la acumulación de células grasas y tejido adiposo bajo la piel que forma una especie de cavidades con apariencia de hoyuelos. Normalmente las zonas más propensas a sufrirla son los muslos, glúteos, cadera y vientre.
Existen tres tipos de celulitis
1. Edematosa. Está presente en muslos y glúteos, principalmente en mujeres de entre 20 y 40 años. Suele producir bastante dolor al tocar la zona afectada y tiene un aspecto amoratado por la falta de circulación. Las personas con sobrepeso y menopausia son más propensas a padecerla.
2. Blanda. Afecta a mujeres de todas las edades pero es común que aparezca entre los 40 y 50 años. Se caracteriza por su flacidez extrema y puede estar presente en muslos, glúteos, brazos, tripa o incluso la espalda. Las principales causas de su aparición son la pérdida de peso de forma drástica y la falta de ejercicio físico.
3. Dura. Tiene un apariencia rugosa y con hoyuelos y al tocarla puede producir dolor. Está presente en la cara interna de las rodillas y en la cara externa de los muslos y suele estar acompañada de estrías. Afecta principalmente a mujeres jóvenes y sus causas principales son la genética, los cambios hormonales y la mala alimentación.
La celulitis puede afectar a cualquier persona, incluso a las de complexión delgada, ya que además del peso influyen otros factores como la genética, el sexo, los cambios hormonales y el estilo de vida. Estas son las principales causas para padecer celulitis por ser factores inevitables, como la carga genética. Una mujer cuya madre o abuela la haya padecido tendrá mayor tendencia a presentarla.
Las mujeres son más propensas a tener celulitis que los hombres, y es que se calcula que solo el 10% de los hombres puede presentarla frente al 90% de las mujeres. Los cambios hormonales son uno de los factores clave, por eso, la pubertad, la menopausia, la menstruación o el embarazo son etapas que estimulan el desarrollo de la celulitis.
Aunque la mayoría de las causas no se puedan controlar, un factor que puede ayudar a frenar la celulitis es mantener un estilo de vida saludable. Los siguientes hábitos favorecen la aparición de la celulitis: mala alimentación, falta de actividad física, no dormir adecuadamente o fumar.
La página web Nutritienda ofrece una serie de consejos para aquellas personas que deseen disminuir su celulitis.
Existen varias formas de frenar la celulitis.
Rutinas para atenuar los efectos de la celulitis
1. Llevar una alimentación equilibrada. Mantener una alimentación variada e hidratarse contribuyen a reducir la celulitis. La base de nuestra dieta deberían ser alimentos que aporten vitaminas y minerales como la fruta o la verdura, evitando así los productos hipercalóricos, el abuso de la sal o el consumo de alcohol y tabaco.
2. Hacer deporte. El ejercicio es beneficioso porque activa la circulación, fortalece el sistema inmune y los huesos y mejora la capacidad respiratoria. Los deportes como el running o el aquagym no acabarán con la celulitis pero ayudarán a atenuarla y a mantenernos activos físicamente.
3. Reducir el estrés. En caso de padecer celulitis, el estrés incrementa sus niveles de cortisol, lo que provoca que el almacenamiento de la grasa aumente. Una buena solución para combatir el estrés es practicar yoga, una técnica que ayuda a relajar y fortalecer los músculos.
4. Evitar ropa ajustada. La ropa ajustada empeora la circulación, favorece la retención de líquidos y esto evita la correcta eliminación de las toxinas. Todos estos factores contribuyen a la aparición de la celulitis, por lo que se recomienda utilizar prendas holgadas y de algodón.
5. Masajear con cremas y aceites. Estos productos ayudan a mejorar la celulitis ya que contienen ingredientes como la centella asiática, el abedul o el retinol, que activan los ácidos grasos y los eliminan. Para tratar la celulitis, basta con realizar un leve masaje con movimientos suaves sobre la zona.
6. Clínicas estéticas. En caso de querer acabar con la celulitis, existen clínicas especializadas donde se utilizan tratamientos con ultrasonidos que destruyen el tejido graso acumulado bajo la piel. Estos se realizan mediante radiofrecuencia, ondas de choque o presoterapia.