El presunto atacante palestino que hace diez días mató a dos colonos israelíes en un pueblo cisjordano fue el objetivo de la redada israelí de hoy en Yenín, que se saldó con su muerte y la de otros cinco milicianos palestinos, y es la tercera más mortífera en Cisjordania ocupada de este 2023.
Soldados del Ejército, miembros del servicio de inteligencia Shin Bet y efectivos de una unidad antiterrorista israelí "eliminaron hoy al abominable terrorista que asesinó" a dos hermanos israelíes el pasado 26 de febrero en la aldea de Huwara, en el norte cisjordano, declaró por redes el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.
"Nuestros valientes soldados actuaron con precisión quirúrgica en el corazón de la guarida de los asesinos", agregó Netanyahu, sobre el operativo israelí que esta tarde derivó en combates con grupos armados palestinos del campo de refugiados de Yenín, bastión de la resistencia armada en Cisjordania y donde hace más de un año crece una milicia autónoma que aglutina a distintas facciones locales.
Todo ello se saldó hoy con seis palestinos muertos -todos ellos milicianos, según fuentes locales- y una veintena de heridos, entre los que hay dos graves, informó el ministerio de Sanidad palestino.
La alta cifra de muertos -que aún podría subir- hace que el de hoy sea el tercer incidente más letal en Cisjordania de 2023, lo que agrava aún más el ciclo de violencia de la región, en el que es el comienzo de año más violento del conflicto palestino-israelí desde el 2000.
A finales de enero, una redada israelí en el mismo campo de refugiados de Yenín se saldó con 10 muertos, y otra incursión en la ciudad de Nablus causó 11 fallecidos hace dos semanas.
Según el Ejército israelí, las tropas entraron esta tarde en Yenín en búsqueda de Abd al Fatah Husein Ibrahim Garusha, de 49 años y sospechoso del ataque de Huwara que se escondía en esa ciudad y que Israel consideró "un agente terrorista" del grupo islamista palestino Hamás.
Las fuerzas israelíes "usaron misiles" y "medios adicionales contra la residencia donde estaba atrincherado", mientras otros palestinos armados disparaban y lanzaban artefactos explosivos contra los soldados. Estos "respondieron con medios de dispersión antidisturbios y fuego real", añadió un portavoz militar.
A su vez, aseguró que algunos hombres dispararon a las tropas "desde una ambulancia" que "usaron como escudo", mientras que dos drones israelíes que sobrevolaban el área fueron derribados.
Los combates dejaron de nuevo una imagen de destrucción en el campo de refugiados de Yenín, bastión de la resistencia palestina en el norte de Cisjordania que ha sido objeto de operaciones muy frecuentes durante el último año.
Paralelamente, mientras los soldados entraban en Yenín, otros efectivos lo hacían en Nablus, donde "detuvieron a dos hijos" del presunto atacante de Huwara que son "sospechosos de ayudar y planificar el ataque terrorista". Ambos "fueron trasladados a las fuerzas de seguridad para ser interrogados", detalló el Ejército.
La oficina del presidente palestino, Mahmud Abás, condenó la actuación israelí, que calificó de "peligrosa escalada que amenaza con hacer estallar la situación y destruir todos los esfuerzos para restaurar la estabilidad".
Estados Unidos y otros socios internacionales buscaron mediar hace poco entre Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP, con gobierno limitado en partes de Cisjordania) para calmar la tensión.
Las autoridades palestinas -cada vez con menos poder y capacidad de control en el norte de Cisjordania, donde milicias locales nuevas actúan contra Israel y rechazan a la propia ANP- piden desde hace tiempo que las fuerzas israelíes reduzcan sus operaciones de captura, mientras que el Estado judío asegura actuar por seguridad tras aumentar los ataques palestinos contra objetivos israelíes en territorio ocupado.
La tensión ha aumentado también estos meses con el actual gobierno de Benjamín Netanyahu, el más derechista de la historia de Israel y con partidos de ultraderecha como socios que instan a aplicar más mano dura contra los palestinos y a profundizar la colonización israelí.
Ante la situación, el aparato de Defensa israelí ordenó elevar el estado de alerta ante el posible lanzamiento de cohetes por parte de milicias palestinas desde Gaza en respuesta a lo sucedido en Yenín, como ha pasado en ocasiones anteriores, según prensa local.
En lo que va de año, al menos 71 palestinos han muerto en choques e incidentes violentos de distinta índole con Israel, mientras que 14 personas han fallecido por ataques de palestinos.
Israel se hizo con el control de Cisjordania durante la Guerra de los Seis Días, en 1967, y mantiene una ocupación militar sobre este territorio que es de las más largas en la historia reciente.