Charo trabaja, desde hace 9 años, en la asociación Ekintza Bibe Bizi Berria de Errenteria con personas que sufren adicciones sin sustancias. Ramón presta su ayuda en Alboan desde hace casi 3 años. Y José Luis, a través de Nagusilan, acompaña a personas mayores de la Residencia de Pasai San Pedro. Son tres de los cientos de voluntarios que, de forma silenciosa y sin pedir nada a cambio, hacen una labor encomiable en Gipuzkoa.
Con motivo del Día Internacional del Voluntariado, que se celebra hoy, 5 de diciembre, Sareginez -la red de entidades sin ánimo de lucro que cuentan con voluntarios en Gipuzkoa- ha sacado su trabajo a la calle, para mostrar lo que hacen, por qué lo hacen y animar a quienes quieran colaborar con ellos. Se trata de entidades que realizan una labor imprescindible en el cuidado del prójimo que no podrían existir sin los voluntarios. Así lo han querido reivindicar con un acto que han celebrado esta mañana en la Plaza Gipuzkoa de Donostia.
Charo, Ramón y José Luis contaban, esta mañana, que empezaron su labor de voluntariado una vez que se jubilaron. Los tres coinciden en que esta labor les aporta más de lo que ellos dan. Charo asegura que "es un esfuerzo enriquecedor. Sí que es verdad que te implicas mucho y a veces también sufres con los pacientes y las familias, pero ayuda muchísimo". José Luis, por su parte, afirma que para él "ha sido muy enriquecedor" y cuenta que acude dos días a la semana a la Residencia de San Pedro "muy contento, la verdad". Y Ramón concluye que "es una labor magnífica: te sirve para tener engrasado el cerebro, estar en forma, moverte y no quedarte apalancado". Cree que ante la jubilación en la que puedes pensar que "solo queda echar miguillas de pan a las palomas y mirar las obras públicas", hay que tener otra actitud: "hacer algo positivo, agradable y que cuando acabas el día, dices: ¡qué bien me siento!".
Proyecto piloto en Gipuzkoa
En el acto de esta mañana, las asociaciones y entidades de Sareginez han repartido marcapáginas plantables, con semillas, con un lema "Siembra voluntariado". Además, tanto Charo como José Luis y Ramón no dudan en animar al resto de ciudadanos a hacerse voluntarios porque siempre son necesarias más manos. De hecho, se trata de un colectivo en el que abundan las mujeres y faltan jóvenes. Ante ello, la Diputación de Gipuzkoa anuncia un plan piloto para paliar esas carencias.
La diputada general, Eider Mendoza, decía esta mañana que "tenemos que hacer un esfuerzo importante para que haya nuevas generaciones que se incorporen a todos estos movimientos voluntarios. Desde la Diputación de Gipuzkoa hemos visto que hay esa carencia y vamos a poner en marcha un proyecto piloto para ayudar". Según ha explicado Mendoza, "hay muchos ámbitos en los que faltan personas" como el de los "deportes, cultura, política, iglesia, etc... tenemos una carencia que queremos abordar".