Las decocciones de hierbas son buenas en cualquier ocasión, pero en estos días en los que los excesos a la mesa con comida y bebida más especial, más abundante y, quizá más pesadas pueden ser un opción reconfortante y que puede ayudar a una mejor digestión y esquivar algunas de sus consecuencias, como una digestión más larga, más pesada, estos incómodos gases o resacas molestas.
Tras una cena o un comida en la que los platos son abundantes, da igual que la receta se saque de los menús más tradicionales o de las cartas más modernas, para muchos la sobremesa va más allá de la charla a los postres o los juegos en familia y sufre a la hora de irse a la cama por la pesadez en el estómago, por ardores o gases que impiden encontrar una postura más cómoda y seguir disfrutando de la velada
Las infusiones, una alternativa
Resulta algo completamente común que tras el postre se disfrute de una humeante y aromática taza de café. No deja de ser una infusión, pero puede que haya otras opciones más adecuadas para dar carpetazo a la comida y empezar con la sobremesa. Entre las alternativas hay una serie de plantas que pueden ayudarnos en este proceso.
La manzanilla
Esta flor es la más popular para todo lo relacionado con los malestares de estómago. Es una de las flores más digestivas. Tiene, sobre todo, propiedades antiinflamatorias y antiespasmódicas que ayudan a expulsar los gases, a calmar el dolor de estómago y a desinflamar el estómago pesado. Es también una planta calmante, efectiva contra los nervios y para combatir el insomnio o la ansiedad. Si se combina con anís, la planta no la bebida, se consigue una de las más infusiones potentes para estos casos, especialmente si hay gases. Lo mejor es beberla después de comer.
El jengibre
Es otra planta medicinal que ayudará que la digestión resulte más plácida. En este caso se usa la raíz .Con ella se pueden eliminar los molestos gases con eficacia. Si se quiere potenciar sus virtudes, se le puede añadir también a la cocción algo de laurel y un par de ramas de canela. La reducción de las flatulencias será notable, además de combatir la sensación de hinchazón. Por cierto, las mujeres embarazadas y madres en periodo de lactancia no deben tomar esta infusión. Además, el jengibre es una planta tonificante y antiinflamatoria que ayuda a combatir la inapetencia. También refuerza la válvula del esófago y previene el reflujo, por lo que ayuda a tratar los trastornos digestivos provocados por una producción insuficiente de ácidos gástricos. Eso só, no hay que beberla si se padece de gastritis o de una úlcera gastroduodenal.
El hinojo
Otra de las posibilidades es el hinojo, que también puede ayudar a combatir los gases y el vientre hinchado. Esta infusión se bebe cada vez que se sientan molestias y siempre después de comer. El hinojo es un buen tonificador para la digestión ya que aumenta las secreciones gastrointestinales. Es también carminativo, favorece la digestión disminuyendo la hinchazón y ayudando a reducir la producción de gases, especialmente los que se producen en el intestino. Por contra, no es apta para embarazadas y madres que den el pecho a sus bebés. Mezclada con anís y comino es aún más potente.
La menta poleo
La clásica menta poleo es una de las infusiones digestivas más efectivas, ya que evita las digestiones pesadas y los gases. Con una infusión de menta se podrá mejorar la digestión difícil eliminado posibles parásitos intestinales y flatulencias, gracias a su poder carminativo y antiespasmódico. La infusión digestiva de menta también tiene la capacidad de neutralizar la acidez, regular el malestar provocando o evitando los vómitos e incluso es eficaz contra la diarrea. Hay que procurar tomar la infusión de menta después de las comidas y nunca tras la cena dadas sus cualidades excitantes.
La hierba luisa
La hierba luisa, tomada en infusión, es considerada un tónico estomacal eficaz para evitar flatulencias, digestiones lentas y espasmos gastrointestinales. Gracias a su sabor alimonado y fresco es una de las infusiones más apetecibles, ,algo que hace que pueda mezclarse con otras plantas para dar un sabor adicional a la infusión. s muy útil también para combatir el estrés y la ansiedad, que, en Navidad con tanto reencuentro y prisas de última hora pueden llevar a más de uno a comer más de la cuenta.
El boldo
El boldo ayuda a prevenir la pesadez de estómago, pero también tiene cualidades que protegen el hígado, limpiándolo, y el páncreas. También facilita la digestión de las grasas, por lo que es especialmente indicado para personas que han tenido problemas con la vesícula biliar, y además fortalece las mucosas del estómago. Esta planta tiene, además, un efecto diurético por lo que te ayuda a eliminar líquidos y depurar tu cuerpo de toxinas.
Otros trucos para una buena digestión
Pero la prevención frente a las malas digestiones empieza también antes, en el momento de sentarse a la mesa con la familia y los amigos. Uno de los males de la sociedad moderna es la velocidad a la que comemos, que apenas nos damos tiempo a disfrutar de lo que tenemos delante. Se trata de comer despacio, de masticar bien cada bocado por muy fast food que sea lo que tengamos en la bandeja o en el plato. Esto es todavía más necesario cuando llegan platos más elaborados y con mayor cantidad. No hay que tener prisa por pasar al siguiente. Y en esto, la conversación entre los comensales también ayuda.
Beber agua también ayuda, especialmente la que ingerimos entre comidas. Y a esto se puede añadir evitar los refrescos con gas, que s se trata de evitar gases no añadamos más de forma artificial. Unas pocas burbujas naturales, como las del agua con gas o la de los vinos espumosos no hacen daño usadas con moderación.
La piña debe ser una de las frutas con las que se debe terminar la comida. Refresca, sacia y ayuda a la digenstión. También evitara que los dulces navideños copen la sobremesa con sus pesados azúcares y grasa.