La empresa energética Siemens Energy sufrió en el primer trimestre de su actual ejercicio una pérdida neta atribuida de 473 millones de euros, un 261% más que un año antes, debido a Siemens Gamesa.
Siemens Energy informó este martes de que en el primer trimestre de su ejercicio 2022/23 facturó 7.064 millones de euros (+18,3 % o +16 % excluidos los efectos de los tipos de cambio y de cartera). Asimismo, aumentó la pérdida operativa hasta 480 millones de euros (+202 %).
"El crecimiento de nuestros pedidos demuestra que tenemos la cartera adecuada para capitalizar la transición energética", dijo el consejero delegado de Siemens Energy, Christian Bruch, al presentar los resultados.
"A pesar de los cargos en Siemens Gamesa, Jochen Eickholt y su equipo progresan en mejorar la sostenibilidad de la compañía. La salida de bolsa de Siemens Gamesa apoyará al equipo en concentrase en resolver problemas operacionales y el cambio de rumbo", añadió Bruch. Pese a la evolución económica contenida en general, el entorno de mercado de Siemens Gamesa sigue siendo favorable.
La división de servicios de gas obtuvo un beneficio operativo de 316 millones de euros (+55,7%), las tecnologías de red eléctrica de 98 millones de euros (+123 %), y la transformación de industria de 42 millones de euros (pérdida de 32 millones de euros un año antes).
Pero Siemens Gamesa tuvo una pérdida operativa de 878 millones de euros, más del doble que un año antes (pérdida de 376 millones euros).
Por ello Siemens Energy revisó a la baja sus pronósticos para el ejercicio 2023 y prevé una pérdida neta en el nivel del año anterior (antes había previsto reducirla notablemente) y un margen de rentabilidad antes de extraordinarios de entre el 1 y el 3 % (antes entre el 2 y el 4 %).