Los trabajadores de la división GTE de Siemens Gamesa respaldaron hoy, por amplia mayoría, el preacuerdo alcanzado entre la dirección de la empresa y los sindicatos para la ejecución de un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) que va a afectar en total a unos 360 empleados de cuatro plantas, según informaron fuentes sindicales a este periódico.
En ese volumen se incluyen a cerca de 215 trabajadores vascos, de los cuales 170 están en la planta guipuzcoana de Asteasu y el resto en oficinas en la vizcaina de Zamudio. El resto de trabajadores afectados pertenecen a las factorías de Lerma y Burgos, siendo la primera de ellas la que concentrará la mayor parte de empleados en suspensión temporal. La división GTE de Siemens Gamesa es la que se ocupa de la fabricación de las multiplicadoras, sistemas que se adaptan a los aerogeneradores para poder entregar energía a la red eléctrica y llevar la tensión generada por la turbina eólica. Estas máquinas se acoplan a los equipos eólicos terrestres, pero en los últimos años se están agolpando las quejas y reclamaciones contra las plataformas 4X y 5X por defectos en la fabricación de algunas de ellas. Esta situación había provocado que la cifra de pedidos nuevos cayese con fuerza, mientras que la mayor parte del trabajo se concentraba en la reparación de esas turbinas.
El acuerdo para el ERTE culmina dos semanas de negociaciones entre empresas y sindicatos, y pese a las implicaciones negativas que supone, fuentes sindicales consultadas lo resumían gráficamente: “una solución positiva en una situación negativa”. Por ley, el ERTE reconoce a los trabajadores el derecho a percibir el 70% de su salario, porcentaje que este caso la dirección de la empresa ha decidido elevar hasta el 85%, además del 100% de las pagas extra, según indicaron fuentes de Siemens Energy.
El compromiso arrancado por la representación sindical en las conversaciones incluye el compromiso de no formalizar ningún despido en dos años, así como el de que la empresa vuelva a contar de forma íntegra con toda la plantilla afectada si las circunstancias de producción cambian a mejor. Fuentes empresariales reconocen la disminución de las ventas en el último año y medio, lo que hace necesario “readaptar” las necesidades de producción. De hecho, la empresa decidió paralizar en junio del año pasado la fabricación de nuevas turbinas 4X y 5X, lo que ha ocasionado una falta de carga de trabajo.
Además de esta negociación, existe un vía separada de conversaciones relativa al ERE planteado por la dirección para el personal administrativo de Gamesa en los centros de Zamudio, Iruñea y Madrid. En total, algo más de 400 trabajadores. Esta negociación arrancó en septiembre, después de que en el mes de mayo la empresa anunciase su voluntad de reducir la plantilla de oficinas. De momento, continúa el diálogo para alcanzar un preacuerdo, aunque fuentes próximas a la negociación creen poco probable que se alcance un punto en común antes de fin de año. Posteriormente, el ERE tendría que ser ratificado por las asambleas de trabajadores y ante las distintas instancias administrativas.
En la comunicación, el mes pasado, de sus resultados correspondientes a su año fiscal 2024 -concluido a finales de septiembre-, Siemens Energy informó de que Gamesa había logrado contener sus números rojos en un 59%, hasta rebajarlos a los 1.781 millones de euros. En este sentido, Siemens Energy prevé unas pérdidas de unos 1.300 millones de euros para Siemens Gamesa de cara al año que viene, aunque mantiene el compromiso de retornar al punto de equilibrio en el ejercicio 2026. En el ejercicio fiscal 2024, Siemens Energy alcanzó unos ingresos totales de 34.724 millones, lo que supuso un alza del 10,8%. Siemens Gamesa aportó 10.008 millones de euros, un 10,1% más, lo que pone de manifiesto que sigue teniendo viabilidad.
Por otra parte, Siemens Gamesa ha llegado a un acuerdo para vender su negocio de electrónica de potencia a ABB por un importe no revelado, según informaron ambas compañías. El negocio -parte de Gamesa Electric- incluye el diseño y producción convertidores, inversores y armarios de control para las industrias eólica, solar y de almacenamiento. El negocio de generadores de Gamesa Electric no está incluido en el acuerdo y permanece en Siemens Gamesa.
El acuerdo incluye la transferencia de unos 400 empleados, dos plantas de fabricación situadas en Madrid y Valencia, así como activos adicionales en Estados Unidos, China, India y Australia. El negocio de electrónica de potencia de Gamesa Electric registró unos ingresos de unos 170 millones de euros en el ejercicio fiscal. El negocio adquirido se centra en productos eléctricos para la conversión de energía.