Vida y estilo

Siete caldos y sopas fáciles para quitarse el frío

Una prometedora sopa de verduras en un bol espera la llegada de los comensales.

En un invierno en el que al frío habitual de esta época del año se suman ola de frío polar yo temporales de nieve un tanto repentinos, una de las coas que más apetece al volver a casa es tomar algo caliente y sabroso que entone el cuerpo y el espíritu. Y para esto pocas cosas hay más eficaces que un sustancioso caldo o una sabrosa sopa.

Por eso vamos a proponer siete recetas, una para cada día de la semana. Ideales para la cena, aportan todo lo necesario para satisfacer a los más exigentes. Son de toda la vida, pero nunca fallan. Tres caldos básicos, para tomar tal cual o para enriquecer cualquier otra receta, y cuatros sopas clásicas y básicas en el recetario de cualquier hogar.

LUNES. Caldo de pollo

Socorrido como pocos platos, además de su popular utilidad como reconstituyente de enfermos, es ideal beberlo porque sí y también como base de cualquier sopa o arroz.

Ingredientes:

— Un cuarto de pollo

— Un hueso de jamón

— Dos zanahorias medianas

— Una cebolla

— Un nabo o alguna otra hortaliza

— Un puerro

— Dos dientes de ajo

Elaboración:

Pelar las zanahorias, el nabo (o la hortaliza que se use) para lavarlos junto al puerro. Se trocean todos estos vegetales. Es recomendable que los trozos sean grandes para luego sacarlos sin problemas. Al pollo se le quita la piel y se lava también.

En la olla se pone aceite se calienta y se añaden las verduras para rehogarlas ligeramente. Entonces se añade el pollo y el hueso de jamón, dándoles unas vuelta para mezclar todo bien durante un par de minutos. Añadimos agua hasta llenarla unos dos tercios de su volumen. Remover y que empiece a cocerse. A medida que se vaya formando espuma, se retira. Cuando ya no salga más, se sala y se tapa.

Si la hacemos en una olla exprés, esperar a que empiece a salir el vapor, bajar el fuego y esperar 20 minutos. Si se utiliza una olla normal, cocer a fuego lento algo más de una hora.

Terminada la cocción, se cuela el caldo. Hay quien separa la verdura de la carne, y la pasa por la batidora para darle un poco más de consistencia al caldo. La carne se aprovecha para croquetas, o bien, si se hace una sopa, lo añade picado.

Para aligerarlo de grasa, una vez enfriado, se mete en el frigorifico se puede retirar la grasa solidificada con una cuchara.

MARTES. Caldo de verduras

Otro fondo clásico que se puede conservar para otras recetas. Los ingredientes son los más comunes, pero se pueden emplear los que se tengan más a mano. Admite pácticamente todo. Además de base de otras recetas, también se consume solo o para enriquecer una sopa de pasta o verduras.

Ingredientes

— Dos zanahorias

— Unas ramas de perejil

— Un puerro

— Un rama de apio

— Una cebolla

— Una hoja de laurel

— Aceite de oliva virgen extra

— Sal

— Dos litros de agua

Elaboración

Pelar y picar grueso todas las verduras. En una cacerola o en la olla exprés, calentamos el aceite de oliva Echamos primero la cebolla y el puerro, para rehogarlas unos minutos a fuego bajo. Después

Añadimos el resto de las verduras, una cucharadita de sal, subimos a fuego medio y rehogamos unos minutos más.

Añadimos el perejil y el laurel. Después todo el agua y subimos el fuego al máximo para que hierva. Cuando alcance este punto, bajamos la potencia a la mitad. Si usamos una olla exprés, cerramos con la tapa y cocinamos 20 minutos a presión máxima. Si es en una cacerola, se tapa y dejamos cocer unos 40 minutos. Después, apagamos y que repose. Luego se cuela y ya. LA verdura se puede tritura para convertirlo en puré.

MIÉRCOLES. Caldo de pecado

También llamado fumet, es el tercero de los básicos para aprovecharlo como base de otras recetas.

Ingredientes

— Un puerro grande

— Una cebolla

— Un puñado de perejil

— 800 g de pescado de morralla o de raspas y cabezas

— Agua

— Sal

Preparación

Una vez limpiados el puerro, el perejil y el pescado (si es morralla, si son cabezas y espinas, con un pase por el grifo vale), lo ponemos a cocer juntos en una cacerola u una olla amplia, con agua y una pizca de sal.

Dejamos cocinar durante 20 minutos. Pero no lo perdemos de vista. Hay que ir eliminando la espuma que se forma. Además es muy fácil que al hervir se sobre, por lo que es imprescindible un atención constante.

Transcurrido el tiempo, retiramos del fuego y colamos el caldo. Es difícil aprovechar los elementos sólidos, demasiado desperdicio y demasidas espinas.

Unas sopa de fideos lista para ser degustada. Foto: Pixabay

JUEVES. Sopa de fideos

Ingredientes

— Dos dientes de ajo

— 30 g tacos de jamón serrano

— 15 g aceite

— Una pizca de pimentón dulce

— 350 g de caldo de pollo

— Dos huevos

— 30 g fideos (da igual el tipo)

Elaboración

En una cazuela ponemos el aceite, añadimos el ajo picado y cuando se doren, se añade el jamón. Se rehoga el conjunto. Incorporamos el pimentón dulce y sofríe brevemente para que no se queme.

Enseguida se echa el caldo de pollo (que puede ser parte del que se hizo el lunes o prefabricado) y dejamos cocinar durante siete minutos.

Aprovechamos estos minutos para cocer los huevos, que una vez pelados se pican muy menudo y se incorporan a la cazuela.

Por último, incorporamos los fideos elegidos y hervimos el tiempo que el fabricante indique en el paquete. Si gustan muy blanditos, se dejan un par de minuto más. Vigilar que no chupen demasido líquido y aque lo que ocurrirá es que espesen la sopa.

VIERNES. Sopa de ajo

Ingredientes

— Cinco dientes de ajo

— Tre huevos

— Seis rebanadas de pan duro

— 50g jamón serrano

— Un litro de caldo de pollo

— Sal

— Pimienta

— Una cucharada de pimentón dulce

— 30g aceite de oliva virgen extra

Elaboración

Se pelan y se filetean los ajos, que se dorarán en una cazuela con el aceite. En este punto se añade el jamón y se rehoga el conjunto.

Se baja el fuego para echar las rebanadas de pan y el pimentón (dulce o picante al gusto del cocinero o de los comensales). Se rehoga durante unos minutos. Sin dejar de dar vuelta, , añadimos el caldo de pollo (el que se preparó el lunes o de tetrabrick) y cocemos a fuego medio durante 20 minutos procurando que no hierva.

Podría terminarse aquí, pero se puede enriquecer el plato con unos huevos cocidos y troceadosen un cazo, los pelamos y troceamos. Otra opción es escalfarlos directamente en el puchero

Salpimentar al gusto y servir caliente, que poara eso estamos en invierno.

SÁBADO. Sopa de pescado con marisco

Ingredientes

— Caldo de pescado

— Cuatro ruedas de merluza (como ejemplo sirven otros pescados)

— 250 g de Gambas

— 250 g de Almejas

— Un tomate

— Un puerro

— Una zanahoria

— Un diente de ajo

— Fideos cabello de ángel

— aceite de oliva virgen extra

Elaboración

En una cacerola ponemos un poco de aceite de oliva y pochamos el ajo laminado, el puerro y la zanahoria picados.

Cuando comiencen a dorarse añadimos el tomate pelado y en dados. Rehogar durante unos minutos más. Cuando quede a nuestro gusto, se añade el caldo de pescado (el preparado el miércoles o comprado en el supermercado).

Una vez haya cocido todo junto un rato, se puede batir todo y así triturar la verdura, lo que dará un poco más de consistencia al caldo.

Volvemos a poner la olla al fuego y vamos echando la merluza (o el pescado de nuestra elección) troceada, las gambas y los fideos. Tras darles unos cinco minutos de tiempo, añadimos las almejas.

DOMINGO. Sopa de tomate

Ingredientes

— 500 gramos de tomates maduros

— Media cebolla

— Un diente de ajo

— Medio pimiento

— Una hoja de laurel

— Sal

— Pimienta

— Aceite de oliva

Elaboración

Llenar una olla con agua y poner los tomates a hervir durante un minuto, escaldarlos en realidad, y enfriarlos en agua fría. Una vez pelados, cortalos en cubitos

Picar fino la cebolla, el medio pimiento y el ajo antes de sofreírlos hasta que se doren una sartén con aceite de oliva. Añadir los tomates picados, el laurel y salpimentar.

Agregar dos vasos de caldo de verdura (del preparado el martes o uno comprado). Bajar el fuego a la mitad y dejar que hierva durante 30 minutos. Revuelve de vez en cuando y revisa que esté bien de sal.

Una vez terminada la cocción, se puede dejar tal cual o pasarla por la batidora, depende del gusto de cada cual. Si se bate, hay que acordarse que quitar la hoja de laurel.

21/01/2022