Silencio y emoción ante la Mano de Irulegi

El director del Planetario de Pamplona, Javier Armentia, nos ha confesado en Onda Vasca que todavía está "con el subidón de la tarde tan preciosa que tuvimos aquí, con ese trocito de historia, además con el respaldo de la gente."

"Lo más increíble es que la gente aguantó, en promedio, unas dos horas de cola para poder entrar a verla, bajo la lluvia." Calculamos que unas 6.000 personas que comenzaron a hacer cola ya desde las 15:00h y eso que la exposición se abría a las 16:30. Cerraron sus puertas más allá de las 20:00, "que es la hora de cierre del Planetario, pero permitimos que toda la gente que vino pudiera verla." 

El propio Javier Armentia tuvo también la posibilidad de ver este importante hallazgo arqueológico: "te quedas un poco maravillado de lo frágil y pequeñito que es. Es una lámina de bronce con el punteado de las inscripciones con esas palabras que todavía no entendemos.... la mano en sí daba ganas de decir: "¡yo quiero una para casa!".

Era la segunda vez que se mostraba la Mano de Irulegi, pero la primera para el público en general. La vez anterior que se mostró, fue el día 16 de diciembre y pudo ser observada por escolares, colectivos y vecindario del Valle de Aranguren, localidad donde se produjo el hallazgo. Seguramente, va a tener una exposición final, todavía no se sabe dónde ni cuándo, porque es un objeto que todavía está en estudio. "Es un trabajo que se está haciendo. yo creo que en el futuro, cuando podamos verla ya definitivamente sabremos ya mucho más de quiénes la pusieron en aquella puerta hace unos 2.100 años".

Pero visto el éxito de ayer, en el Planetario de Pamplona estarían dispuestos a repetir la experiencia. "Nosotros estaríamos encantados" asegura Armentia y añade "la gente ha venido por la ilusión, por ese sentimiento de que nos está hablando de nuestra historia, pero a la vez venía con ganas de aprender más y eso es lo que quiere el Planetario, un centro en el que puedes aprender y conocer cosas. Si nos vuelven a ofrecer la posibilidad de tenerla, vamos a estar encantados." Pero también nos advierte que todos los investigadores que están involucrados en este proyecto les ha pedido paciencia, "nos han dicho que esperemos y ahí nos quedaremos, a verlas venir".