La reunión de la mesa negociadora del convenio del metal de Bizkaia concluyó ayer miércoles sin avances, a pesar de que la mayoría sindical (LAB, CCOO y UGT) presentó una nueva propuesta, rechazada por la parte empresarial, tras lo cual los sindicatos advirtieron de que insistirán en las movilizaciones.
La mayoría sindical transmitió una oferta en la que, modificando los incrementos a partir del segundo año de convenio, se asumía la fórmula con cláusula de revisión de los IPC anuales, en sintonía con la propuesta de FVEM. Además, se ofrecía una rebaja de la petición de reducción de la jornada anual de trabajo de 24 a 8 horas anuales; de la subrogación para todo el sector han pasado a solicitar que sea solo para el personal de instalación y mantenimiento de líneas de telefonía y fibra óptica, y se renuncia a la prohibición de contratación por ETT.
Para la patronal FVEM, lo presentado por la mayoría sindical “dista mucho de lo que las empresas pueden ofrecer, tanto en términos salariales, como de jornada, subrogación, licencias...”. El otro sindicato, ELA, que negocia separado de los otros tres, apuesta por la huelga indefinida en el sector, a convocar rápidamente.
Tras terminar sin acuerdo, las partes siguieron con sus reproches, aunque las dos dicen que están dispuestas a seguir negociando. No se ha fijado ninguna otra fecha de reunión de la mesa. Así, la patronal FVEM considera que ya han puesto encima de la mesa una propuesta que cumple con las anteriores exigencias sindicales, por lo que su margen de negociación “es muy limitado, pudiéndose discutir detalles o matices, pero la oferta realizada es más que generosa”.
Mientras, LAB, CCOO y UGT consideran que la FVEM desprecia la negociación, y advierten de que en esta tesitura “la lucha y la movilización es la única alternativa que parece aceptar la patronal”. “La única parte que no ha negociado ha sido la patronal”, advirtieron las centrales sindicales.