Las tareas de rescate continúan hoy en el condado de Tengxian de la provincia meridional de Guangxi, donde este lunes se estrelló un Boeing 737-800 de la aerolínea China Eastern con 132 personas a bordo, sin que se haya informado todavía del hallazgo de ningún superviviente ni de las cajas negras.
El avión realizaba el trayecto entre las ciudades de Kunming (suroeste) y Cantón (sureste) y despegó a las 13.15 hora local (05.15 GMT) del lunes antes de precipitarse a tierra en Guangxi a las 14.38 hora local (06.38 GMT).
Por el momento ninguna fuente oficial ha aclarado si viajaban extranjeros a bordo del aparato malogrado. El siniestro provocó un incendio forestal en la zona, de difícil acceso para los equipos de rescate por su escarpada orografía y su remota ubicación.
El Ejército Popular de Liberación (Ejército chino) movilizó en la madrugada del martes a 80 soldados de la región para colaborar en las labores de rescate, que se sumaron a más de 700 bomberos de la provincia local y otros 500 enviados por la provincia vecina, Cantón.
El incendio fue sofocado en la tarde del lunes y los equipos de rescate pudieron acercarse al lugar del suceso, donde prosiguieron sus tareas durante la noche: "Hay piezas del ala del avión, algunas de entre dos y tres metros. También hay escombros y restos, algunos de los cuales son probablemente piezas de ropa", describe un trabajador citado por la agencia Xinhua.
La Comisión de Sanidad de Guangxi envió asimismo 36 ambulancias y 80 trabajadores médicos a la zona para asistir a posibles supervivientes y el vice primer ministro chino Liu He se ha desplazado al lugar para dirigir las operaciones.
"EN PICADO"
Según datos del portal de seguimiento de vuelos FlightRadar24, la aeronave volaba a las 14.19 hora local (06.19 GMT) a una altitud de 29.100 pies (8.870 metros) cuando, a unos 55 kilómetros al oeste de la localidad de Wuzhou, comenzó a descender.
El último punto de contacto del vuelo, según el citado portal, fue a unos 25 kilómetros al suroeste de Wuzhou, a una altitud de 3.225 pies (989 metros), a las 14.22 hora local (06.22 GMT), lo que supondría que en apenas tres minutos el aparato descendió casi 8.000 metros.
Otros testigos hicieron referencia al sonido de la explosión: "Escuché un ruido fortísimo y comenzó rápidamente un fuego en mi plantación de árboles", explicó un lugareño.