Llegamos al último tercio de la temporada y las habas están ya en el cazo. La Real, eliminada de la Europa League y con la necesidad de ganar puestos en Liga y realizar una gesta en el Bernabéu en Copa, atraviesa momentos de incertidumbre en cuanto al juego se refiere y de transición, según palabras de la propia Dirección Deportiva. "Estamos escribiendo un nuevo libro", apuntaba el presidente Jokin Aperribay a principio de temporada. Un libro que de momento no cuenta con sus mejores protagonistas.
Pese a ser un año de cambios, la mayoría de realistas sabrían dibujar el once de gala de Imanol esta temporada: Remiro bajo palos; defensa para Aramburu, Zubeldia, Aguerd y Aihen; medular con Zubimendi, Brais y Suçic, y Kubo, Barrene y Oyarzabal como cierre. Para gustos los colores, pero este es el once más reconocible de esta Real. Lo curioso es que esta alineación solo ha partido de inicio en una única ocasión. Fue en el partido de Copa ante el Real Madrid, donde la Real perdió 0-1.
En ningún otro de los 46 partidos que lleva la Real esta temporada podemos encontrar esta alineación de inicio. En hasta 3 partidos más la Real partió con diez de estos jugadores, y habría que sumar otros 11 encuentros donde al menos nueve de estos futbolistas fueron alineados de partida. Es decir, que la Real no ha podido disfrutar de su once fantástico apenas, o que su once de gala se aleja del que todos tenemos en mente.