El Gobierno sirio de Bachar al Asad aceptó abrir temporalmente dos cruces fronterizos adicionales entre Turquía y la zona del noroeste del país bajo control rebelde para facilitar el suministro de ayuda humanitaria tras es reciente terremoto.
Así se lo comunicó este lunes el jefe humanitario de la ONU, Martin Griffiths, a los miembros del Consejo de Seguridad durante una reunión a puerta cerrada celebrada después de entrevistarse en Damasco con Al Asad, según dijo a EFE una fuente diplomática.
La apertura de estos dos pasos fronterizos, que fue solicitada por Naciones Unidas ante la crisis desatada por el terremoto de la semana pasada, tendría una duración inicial de tres meses.