pogacar estará en flandes y no en la itzulia, pruebas difíciles de compaginar tras suprimirse un vuelo clave
El 21 de abril de 2013, un servidor se dejó los higadillos corriendo el maratón de Hamburgo, solo horas antes de que Dan Martin levantara los brazos en Lieja superando a Purito y a Valverde. Viene a cuento la coincidencia porque mi viaje posterior implicó conectar en Bruselas con el vuelo que unía la capital belga y Bilbao, colmado aquel día de ciclistas profesionales que regresaban a casa tras disputar La Doyenne, la última en la que ha estado el Euskaltel. Markel Irizar, con el culo pelado de participar en las clásicas del norte como escudero de Fabian Cancellara, solía decir en broma que la aerolínea le reservaba un asiento VIP en el famoso avión Zaventem-Loiu de los domingos a las 20.45. Famoso por lo mucho que lo frecuentaban el oñatiarra y medio pelotón vasco. Y famoso también por suponer la única vía posible para compaginar Flandes e Itzulia.
el doblete No resulta sencillo plantarse en la salida de País Vasco habiendo sufrido la víspera sobre el adoquín flamenco. El último intento considerable lo protagonizó hace cuatro años Vincenzo Nibali. Se dejó ver algo en Bélgica, donde sin embargo terminó firmando una modesta 28ª plaza. Puso rumbo a Bruselas. Aterrizó luego en Loiu cerca de las once. Y ya en torno a la medianoche llegó al hotel Villa Antilla de Orio, donde se hospedaba su Bahrain Merida. Al día siguiente compitió con todas las de la ley y se retorció en las rampas de Elkano, previas a la meta de la primera etapa de la Itzulia en Zarautz. Pero perdió ya medio minuto respecto a la selección de catorce ciclistas que terminarían disputándose el amarillo final. A Michal Kwiatkowski, que también había embarcado en el mismo vuelo del italiano, no se le dio mejor. De hecho se le dio peor.
la ausencia Cuando arrancó la presente temporada, Tadej Pogacar comunicó su calendario de competiciones, destacando en el mismo la decidida apuesta primaveral por las clásicas. El esloveno ya demostró en la Milán-San Remo que corre para ganarlas. Y, aunque el triunfo en Oudenaarde parece más complejo para él que la Classicissima, seguro que lo intenta el domingo en Flandes, cita que tiene marcada en rojo en la agenda. Su garantizada presencia allí pasado mañana venía a implicar, ya desde enero, su renuncia a la Itzulia, porque no queda rastro del Bruselas-Bilbao nocturno de los domingos. Parece que ya no lo operan. El campeón balcánico no optará así a una ronda vasca que en 2021 tuvo relativamente cerca. ¿Podría haber probado a doblar de resultar posible? Tiene toda la pinta de que sí, de que subirse a nuestro desaparecido vuelo habría supuesto un opción sensata. Primero, porque el doble ganador del Tour no figura en la lista de preinscritos para la Amstel Gold Race del domingo 10 de abril: tras De Ronde, no correría hasta la Flecha Valona. Y segundo, porque la configuración de la propia Itzulia le invitaba a acercarse: la prueba arranca el lunes con una crono muy corta de 7,5 kilómetros, y continúa el martes con una etapa llamada a ser la más tranquila y menos decisiva de la edición.
lo del domingo Sea como sea, con Pogacar o sin él, afrontamos en Euskadi una de las semanas ciclistas más potentes del año. Hondarribia se viste de gala desde el domingo, para cuando está prevista la presentación oficial de los equipos. Arrancará a las 18.30 horas, porque nadie en el mundillo txirrindulari, ni siquiera sus propios protagonistas, quiere perderse antes lo que suceda en Bélgica. Van Aert era, hasta hace pocas horas, el gran favorito en tierras flamencas: corría en casa, venía acreditando forma y contaba a su servicio con el mejor equipo de clásicas. Sin embargo, ayer se ausentó del entrenamiento en el que sus compañeros reconocieron el terreno. "No se siente bien y su concurso el fin de semana es improbable", explicaron los directores. Si el ciclista termina causando baja, nada que objetar. Si acaba corriendo, resultará imposible separar tal episodio del vivido hace quince días justo antes de la Milán-San Remo, cuando el Alpecin Fenix anunció de golpe y porrazo la presencia de Van der Poel en Italia. La versión oficial apuntó entonces a que Mathieu relevaba en la alineación al indispuesto Gainni Vermeersch. Pero luego hizo lo que hizo, brillante tercero, y surgieron las suspicacias. Dentro de 48 horas podremos intuir si los responsables del Jumbo Visma han querido devolver la presunta jugarreta. Estaría divertido.
'el día menos pensado' y el conflicto mas-lópez
El Día Menos Pensado, el ya célebre documental del equipo Movistar, emitió el lunes su tercera entrega, la correspondiente a la temporada 2021. Sorprendieron dos cosas: que el foco se situara de forma clara sobre la compleja convivencia de Enric Mas y Miguel Ángel López, y que el balear (sigue en la escuadra) saliera peor parado que el colombiano (ahora corre en el Astana). La primera circunstancia resulta decepcionante, porque Movistar, como productora audiovisual, siempre se ha caracterizado por cuidar la vertiente más pura del deporte y huir del chismorreo. La segunda, mientras, sí habla bien de un trabajo periodístico que incluyó las versiones de ambas partes, como debe ser. Supermán, aun habiendo cometido errores (los reconoció), sonó bastante más convincente que su ya excompañero.
movistar al desnudo
invasión de ucrania
al antiguo gazprom se le agota el tiempo
La invasión rusa de Ucrania implicó en materia deportiva una catarata de reacciones y decisiones que, en lo concerniente al ciclismo, se tradujeron principalmente en la inhabilitación del equipo Gazprom. Sucedió hace un mes, y en la estructura lo han intentado todo a partir de entonces: desde competir con un maillot blanco luciendo un mensaje por la paz hasta encontrar un nuevo espónsor, ajeno a los países implicados en el conflicto, que garantice la continuidad del equipo. Nada ha llegado a buen puerto, y los directivos de la escuadra no pueden asumir ya los pagos a los 52 trabajadores de la misma, entre ciclistas y demás personal. La búsqueda de un patrocinador continúa, pero mientras, los corredores ya han sido liberados de sus contratos. Son agentes libres en el mercado. Y entre ellos hay posibles fichajes muy interesantes.