El PNV volvería a ganar las elecciones forales. Así se desprende del apartado electoral del Sociómetro que ha publicado la Diputación este martes, el último antes de la cita de mayo. Con 21 escaños y el 36,7% de los votos, mejoraría los resultados de 2019 y aventajaría en más de dos puntos y dos junteros a EH Bildu, segunda fuerza con 19 asientos y el 34% de los votos. Pocos cambios, por lo tanto, en el bipartidismo guipuzcoano que volverá a vivir en mayo una lucha entre PNV y EH Bildu, dos formaciones que recaban más del 70% de los apoyos y casi el 80% de los escaños.
Por detrás se situarían las otras tres formaciones con representación en las Juntas, que volverían a repetir presencia. El PSE sería la tercera fuerza con 9 escaños, 1 menos que en la actualidad; muy por delante de Elkarrekin Podemos, que se dejaría la mitad de sus representantes (de 4 a 2) y del PP, que mantendría su juntero en la Cámara foral.
Con la designación de Eider Mendoza, que puede convertirse en la primera diputada general de Gipuzkoa, el PNV continúa en la primera posición en la fotografía tomada por Gizaker entre el 1 y 12 de diciembre, cuando se realizó el trabajo de campo, fecha en la que ya se conocían los principales candidatos. Lo haría con los mismos 21 escaños que le han dado los últimos sociómetros, uno más que los conseguidos en 2019.
Tampoco en el caso de EH Bildu, que con la candidatura de Maddalen Iriarte aguantaría la subida de dos escaños con respecto a la cita foral de hace cuatro años. En las distintas encuestas elaboradas durante la legislatura ha llegado a estar medio punto por encima del último dato, pero el 34% mejoraría en más de dos puntos el resultado de 2019.
El Sociómetro vuelve a evidenciar que Gipuzkoa se articula en torno a un bipartidismo abertzale en el que ambos partidos sumarían más del 71% de los votos con una abstención del 35,1% y, trasladado a cada una de las circunscripciones, sumarían 40 de los 51 escaños, cuatro de cada cinco.
La fuerza de cada una de las siglas es tal que ni la quimérica suma de las restantes (PSE, Elkarrekin Podemos, PP, etc.) daría para igualar a ninguna de las dos.
PSE, Elkarrekin Podemos y PP
La tercera posición del Sociómetro vuelve a ser para el PSE, la única sigla que con respecto al Sociómetro de mayo de 2022 incrementa en apoyo, ya que pasaría del 15,2% al 16%, por debajo del 17,3% de 2019. Aun así, el aumento le permitiría a la plancha liderada por José Ignacio Asensio recuperar uno de los dos escaños que había perdido hace medio año y situarse en los 8 representantes en detrimento de Elkarrekin Podemos, que de 3 hipotéticos asientos en mayo de 2022 bajaría a 2 al perder su representación en Deba-Urola, escaño que iría a parar al PNV. En número de votos, del 9% de 2019 bajaría al 7,3%. La candidata a diputada general, Miren Echeveste, lograría representación por Bidasoa-Oiartzun.
La caída de Elkarrekin Podemos por debajo del umbral de tres junteras abocaría a la coalición al Grupo Mixto, en el que hoy solo se encuentra el PP, que con casi el 4% de los sufragios mantendría su único juntero por Donostialdea, con la novedad de Mikel Lezama por Juan Carlos Cano.
La investigación, con un trabajo de campo de 1.200 personas encuestadas entre el 1 y el 12 de diciembre y un margen de error de 2,8 puntos, arroja pocos cambios respecto al panorama de las últimas citas forales. Si atendemos a las circunscripciones, el PNV mantiene sus escaños en todas (6 en Donostialdea; 4 en Bidasoa-Oiartzun y Oria) salvo en Deba-Urola, que pasaría de 6 a 7. EH Bildu, por su parte, fundamenta el crecimiento en Donostialdea (de 4 a 5) y Bidasoa-Oiartzun (de 3 a 4), quedándose en los mismos 4 y 6 en Oria y Deba-Urola, respectivamente.
El PSE pierde su escaño en Bidasoa-Oiartzun (de 3 a 2), conservando los cuatro de Donostialdea y el escaño de Oria y Deba-Urola, mientras que Elkarrekin Podemos conserva un representante en dos circunscripciones: Donostialdea, donde pierde uno; y Bidasoa-Oiartzun. En 2019 perdió su representación en Oria y ahora lo perdería en Deba-Urola.
Por último, el PP se dejaría casi un punto si lo comparamos con 2019: del 4,8% de entonces al 3,9%, que en Donostialdea supone el 6,7% de los apoyos, suficientes para conseguir escaño. En cuanto a Vox, con una intención de voto del 1,2%, no entraría en las Juntas, consiguiendo su mayor apoyo en Donostialdea (sin superar el 2,4%) y Bidasoa-Oiartzun (2,1%). En Oria y Deba-Urola, Vox sería residual y la encuesta le adjudica un 0%.