Ha terminado bien, pero se han llevado un buen susto tanto Sofía Suescun como su madre, Maite Galdeano. La exconductora de autobús tuvo que llevar a su hija de urgencia al hospital este martes después de que esta última se pasara toda la mañana vomitando sin saber el motivo, y alarmó a sus seguidorres al subir una foto de Sofía con muy mala cara y tumbada en una camilla de hospital.
La vencedora de Gran Hermano y Supervivientes tuvo que ser ingresada durante unas horas, en las que estuvo vigilada y se le suministró medicación vía intravenosa. "Hoy a las seis de la mañana ha venido Sofía a mi cama con la cara desencajada diciéndome que había vomitado ya tres veces, así que le he dicho que nos íbamos al hospital. En el camino ha seguido devolviendo en una bolsita de la fruta", explicaba Galdeano en sus stories de Instagram.
La navarra, que pasó días atrás por el mismo hospital por un caso similar, quería tranquilizar a los fans sobre el estado de salud de su hija, de la que no se separó hasta que le relevó Kiko Jiménez, novio de la influencer pamplonesa. “Nos han dicho que hay un virus que está atacando sobre todo a niños y que consiste en vómitos y diarreas durante 24 horas. Se ha recuperado muy pronto, pero me extrañaba que la recuperación fuese tan inmediata. Al rato se ha empezado otra vez a encontrar mal y ha tenido que volver a venir el personal para volver a ponerle todas las cosas para que no vomitase. Ya se encuentra mejor", afirmaba Galdeano.
Horas después, Sofía Suescun recibía el alta y ella misma confirmaba este miércoles a través de sus stories que la recuperación era completa. “Qué bien se está cuando se está bien. He dormido 12 horas... y ya estoy más que recuperada!!!”, escribía junto a una foto en la que aparecía tumbada en el jardín de su casa. Después acudió con normalidad a sus compromisos laborales.