'Soft skills', unas habilidades cada vez más demandadas

En un entorno tan rápidamente cambiante como el actual, la formación constante es una aliada clave para las organizaciones de cara a atraer y retener talento. No cabe duda de que la experiencia profesional y la formación académica son determinantes, sin embargo, las empresas valoran cada vez más aptitudes personales como la empatía, la capacidad de resolución de conflictos o la resiliciencia, aspectos que tras el varapalo sufrido por la pandemia del covid han tomado más relevancia si cabe. Nos referimos a las denominadas habilidades blandas o soft skills. Y es que según el Informe de empleos en auge publicado por Linkedin, el 57% de los directivos consideran que las soft skills son más útiles que las hard skills (habilidades duras). No obstante, en el camino hacia la capacitación profesional, es vital conjugar ambas capacidades.

¿Por qué son ahora se valoran más las soft skills?

En un mundo en el que predomina la digitalización y la automatización, las cualidades personales adquieren más importancia que nunca. Las soft skills se refieren a las competencias sociales, y están ligadas a la comunicación y a la gestión de las emociones. La escucha activa, la resiliciencia, la capacidad para el trabajo en equipo, la motivación, la resolución de problemas, el pensamiento crítico y analítico o la administración del tiempo entrarían dentro de las habilidades blandas. Y es que estas competencias, que complementan al conocimiento técnico, difícilmente pueden ser reemplazadas por una máquina, por lo que cada vez son más demandadas por las empresas.

Por contra, cuando hablamos de hard skills, nos referimos a las capacidades técnicas, es decir, a todas aquellas aptitudes derivadas de la formación y el desempeño profesional que figuran en nuestro currículum: títulos académicos, certificados de idiomas, conocimientos técnicos, etc.

¿Cuáles son las habilidades más solicitadas?

Aunque este tipo de habilidades están estrechamente ligadas a la personalidad del individuo, la buena noticia es que pueden ser cultivadas. De hecho, se denominan "habilidades blandas" porque se pueden modelar.

Según el informe What Workers Want 2020, elaborado por la multinacional de recursos humanos Hays, las habilidades blandas que más se valoran son las siguientes: en primer lugar, el 69% de los encuestados se inclina por la resolución de problemas; en segundo lugar, la flexibilidad es fundamental para el 57% de las empresas preguntadas; y, finalmente, la tercera cualidad que destacan es la capacidad de colaboración, una habilidad importante para el 37% de los consultados. Uno de los aspectos más interesantes al comparar dicho estudio con el elaborado en 2019 es que si un año antes las habilidades técnicas se valoraban por encima de las soft skills, en 2020 dicha tendencia se invierte.

La creatividad, la capacidad de negociación, el liderazgo o el manejo del estrés son otras habilidades muy valoradas que resultan muy interesantes a la hora de gestionar tanto equipos de personas como proyectos.

¿Cómo pueden las organizaciones potenciar las 'soft skills'?

Formación. Tal y como señalábamos al inicio, las habilidades blandas se pueden cultivar, resultando especialmente eficaz la formación dirigida al trabajo en equipo y a estimular la creatividad.

Comunicación. Siendo este uno de los ámbitos fundamentales donde florecen este tipo de habilidades, mejorar la comunicación interna puede resultar de gran ayuda a las organizaciones.

Cuestión de cultura empresarial. Si queremos potenciar habilidades personales como la flexibilidad, la resiliencia, la empatía o el compromiso, la apuesta por las soft skills debe formar parte de la cultura de la empresa.

¿Y qué hay de las habilidades técnicas?

Según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística, los empleos TIC crecieron un 18,3% durante el año 2020. Es obvio que las nuevas tecnologías han irrumpido en el mercado laboral, no en vano se estima que en 2025 más del 80% de los negocios impulsarán planes de digitalización, haciendo que la automatización forme parte de 85 millones de empleos en el mundo.

En este contexto, no es de extrañar que las hard skills más solicitadas estén vinculadas a la tecnología. El análisis de datos, blockchain, cloud computing, ciberseguridad o la programación web son algunas de las disciplinas estrella del panorama actual.

Nueva edición de GiTalent

El próximo 9 de junio tendrá lugar en Donostia la quinta edición de GiTalent, el foro dedicado a la promoción del talento organizado por NOTICIAS DE GIPUZKOA, que en esta ocasión va a poner el foco en la importancia de la formación en el desarrollo de la carrera profesional y el engagement del talento como clave del futuro sostenible de las organizaciones. La jornada, que se desarrollará en el museo San Telmo, acogerá interesantes ponencias y mesas redondas en donde se analizarán las claves para atraer y retener talento. Para asistir a esta nueva edición de GiTalent es preciso inscribirse previamente.