Inspección de Trabajo realizó un total de 20.587 actuaciones el año pasado, de las cuales, el 52,77 % fueron en prevención de riesgos laborales (10.864), según el balance presentado este miércoles por el vicelehendakari Mikel Torres, la viceconsejera de Trabajo y Seguridad Social, Elena Pérez Barredo, y la subdirectora de la Inspección de Trabajo, Iciar González.
Del cómputo global de actuaciones, se encontró algún tipo de anomalía en el 34% de los casos, pero sólo en un 9,25 % de ellos esa irregularidad dio lugar a una infracción. A la vista de estos datos, Torres destacó que "no tenemos una Inspección de Trabajo especialmente punitiva, sino que su labor es eminentemente proactiva y preventiva".
De las 20.587 actuaciones realizadas en Euskadi, el 36,47 % de ellas tuvieron que ver con las relaciones laborales, la mayor parte de ellas con el control del tiempo de trabajo, el registro de jornada y las condiciones de trabajo. Precisamente, de las actuaciones referidas a la jornada de trabajo la Inspección realizó requerimientos o interpuso sanciones en el 64,29 % de los casos.
Asimismo, se revisaron 38.806 contratos, de los cuales 3.345 se transformaron en indefinidos y a tiempo completo, aunque este dato se incrementará cuando se obtengan los resultados de los dos últimos planes de choque contra el fraude en la contratación.
Torres ha recordado que "en numerosas ocasiones sólo salen a relucir aspectos negativos que inciden en la imagen de los propios trabajadores, como los elevados costes salariales, el mal llamado absentismo laboral, lo negativo del incremento del SMI o el cataclismo de la reducción de jornada laboral, pero se habla muy poco del constante incumplimiento de una parte de las empresas vascas, de la legislación laboral que incide directamente en los trabajadores, en sus condiciones de trabajo y en su salud".
"Por esta razón es tan importante la Inspección de Trabajo en el País Vasco, ya que da a conocer a la ciudadanía y a la opinión pública que todavía siguen existiendo irregularidades graves por parte de muchas empresas en prevención en seguridad y salud en el trabajo, fraude en la contratación e incumplimientos de la Jornada de Trabajo", ha subrayado.
Nuevo plan de gestión
Respecto a los planes para este año, el consejero ha avanzado que comenzará a redactarse el Segundo Plan de Gestión de la Inspección de Trabajo del País Vasco, que será la hoja de ruta para los próximos años en la gestión de este servicio público. Con ello se busca dar cumplimiento a las ratios que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) marca como aceptables, es decir, una persona inspectora por cada 11.000 personas trabajadoras.
En este sentido, Torres mostró su confianza en cubrir las plazas creadas en años anteriores y que implicaron un crecimiento de la plantilla cercano al 25 % para poder, a partir del ejercicio siguiente, crear las plazas suficientes para alcanzar este compromiso.
Por otro lado, el vicelehendakari confirmó que los Gobiernos vasco y español ultiman la transferencia de los permisos de trabajo de las personas extranjeras y anunció que la próxima semana se reunirá la Comisión Mixta de Transferencias para dar luz verde a este traspaso de competencias, clave para facilitar que personas extranjeras puedan acceder al mercado de trabajo vasco en un momento en el que hay escasez de profesionales en algunos sectores.