Solo el Alavés suma un triunfo en la zona baja

Decir que el Deportivo Alavés ha reaccionado con la llegada de Julio Velázquez no es una locura. No obstante, pese a que los babazorros hayan dado un paso al frente en las últimas semanas, la realidad es que la permanencia sigue siendo un reto muy complicado debido a la paupérrima labor realizada a lo largo de toda la temporada y, además, el escaso número de jornadas que quedan por delante para completar tal heroica remontada –y eso que, en términos generales, el fin de semana ha sido bastante positivo–.

A falta, en concreto, de cuatro partidos para que se cierre el telón del curso 2021-22, y tras haber vencido (2-1) al Villarreal de Unai Emery el sábado, el Glorioso ocupa la penúltima posición de la tabla y se encuentra, con 28 puntos, a otros cuatro de la salvación. Un objetivo que limita el Cádiz con uno de ventaja sobre el Granada, que no pudo pasar del empate (1-1) en el estreno del gasteiztarra Aitor Karanka, ante el Celta en Los Cármenes, como entrenador del conjunto nazarí.

En la misma situación que los gaditanos –esto es, con 32 puntos–, pero con el resultado particular a favor sobre la propia escuadra amarilla, está el Mallorca. Los hombres de Javier Aguirre no pudieron dar la sorpresa frente al Barça en el Camp Nou y, en consecuencia, continúan metidos de lleno en la pomada. Tanto es así que su duelo de la próxima jornada, en la que se batirán con los granadinos, es igual e incluso más relevante que la reciente visita de los albiazules a tierras bermellonas.

Los granotas se descuelgan Por último, literalmente, se encuentra el Levante. Después de firmar, aunque de manera unilateral, las tablas en Mestalla, los granotas ocupan el farolillo rojo de LaLiga y su única esperanza es ganar los cuatro partidos que les restan por disputar. Algo a lo que, por si ya no fuera complicado de por sí, también hay que sumarle la posibilidad de que, además de sumar 12 puntos, necesiten una carambola favorable de los demás contendientes a la salvación.

Lo que está claro, retomando la situación del Alavés, es que la visita a Balaídos es clave. Y no solo en lo matemático, que también, sino en lo anímico, porque un triunfo del Glorioso frente al Celta significaría volver a recortar sí o sí distancias con el objetivo –debido a los dos duelos directos del fin de semana (Mallorca-Granada y Cádiz-Elche)– y, de esta manera, afrontar las últimas tres finales con la certeza de que realmente hay esperanza.

Celta. Pese a que el Celta contaba con multitud de futbolistas apercibidos en su visita a Los Cármenes, donde empató (1-1) frente al Granada de Aitor Karanka, Eduardo Coudet no tendrá que echar de menos a ninguno de ellos para recibir al Deportivo Alavés este sábado. Al contrario que Julio Velázquez, que no podrá contar con dos piezas importantes como Duarte y Escalante, el técnico argentino sí tendrá a su disposición a titulares como Néstor Araujo, Renato Tapia, Denis Suárez, Fran Beltrán o Santi Mina, todos ellos, además del revulsivo Thiago Galhardo, con cuatro tarjeta amarillas en sus respectivos casilleros.

Coudet, con todos disponibles

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