La sala de gestión de emergencias de SOS Navarra recibió entre las 18:50 del pasado viernes 1 de septiembre hasta las 23:20 del sábado 2 de septiembre, coincidiendo con el periodo de máxima afección de la DANA (depresión aislada en niveles altos) en Navarra, un total de 450 llamadas relacionadas con ese episodio de precipitaciones y tormentas.
De las 450 llamadas recibidas, 159 estuvieron relacionadas con la presencia de obstáculos en las vías de circulación: 91 con inundaciones; 38 con desprendimientos; 25 con la presencia de objetos en la vía pública y 5 con la presencia de sustancias deslizantes.
Asimismo, se registraron 78 llamadas relacionadas con accidentes, de las que 68 se refirieron a accidentes viales y las 10 restantes a accidentes en la vía pública. Además, se registraron 11 llamadas relacionadas con rescates o salvamento de personas.
Finalmente, las 202 restantes estuvieron relacionadas con diversas asistencias técnicas, principalmente achiques de agua (170), 17 con problemas en fachadas, 3 con saneamiento de edificios, 9 con caída de árboles o farolas y 3 con limpieza de vías.
Las intervenciones se concentraron principalmente en la Cuenca de Pamplona y en la mitad oeste de la Comunidad Foral, aunque también se produjeron avisos en otras zonas, especialmente en la zona noroeste.
El desarrollo del evento meteorológico impactó especialmente sobre la capital navarra y su comarca, donde se registraron precipitaciones acumuladas de alrededor de 150 l/m2 en menos de 24 horas. El servicio de bomberos realizó 96 intervenciones de achique a lo largo del episodio, de las cuales 74 se realizaron en la Cuenca de Pamplona, las más numerosas en los barrios situados en la zona centro y este del área metropolitana.
Pamplona pide a la MCP la limpieza de sumideros
El Ayuntamiento de Pamplona ha trasladado a la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona la necesidad de acometer el mantenimiento y la limpieza de los sumideros de la ciudad para que no se produzcan incidencias como las del pasado fin de semana, con balsas de agua que afectaron a varios puntos de la ciudad. El Ayuntamiento insiste también en tener una comunicación más directa con la empresa de limpieza de redes públicas contratada por la Mancomunidad para actuar de forma más coordinada en situaciones excepcionales.
Las incidencias que se produjeron los días 1 y 2 de septiembre fueron causadas por la acumulación de agua superficial en lugares concretos, principalmente, del barrio de Rochapea y de la calle Miluze. En general, según el Consistorio, se produjeron balsas de agua por imposibilidad de desagüe de los sumideros, bien por falta de capacidad o por acumulación de material. En algunos casos, la acumulación de material se podría deber a un mantenimiento insuficiente y, en otros, al arrastre de la suciedad por la corriente superficial.
La mayor balsa se produjo en el entorno de la plaza Sancho Abarca en la Rochapea y se extendió por las calles Río Arga, Ochagavía, Joaquín Beunza y Pedro de Alejandría. Alcanzólos 40 centímetros. El agua entró también en los aparcamientos adyacentes y llegó a alcanzar los 5 o 10 centímetros. La problemática de ese punto se debe a la insuficiente capacidad de desagüe de la red de pluaviales que pasa por allí por un incorrecto diseño. Igualmente, se generaron balsas de agua en la plaza Pompeyo y en la calle Cruz de Barkazio, con afección a algunos locales de planta baja.
En la calle Miluze, se cortó el tráfico entre las dos rotondas en ambos sentidos, también por falta de capacidad de evacuación de la red y por el agua de la escorrentía del talud de tierra en la acera de Barañáin. Asimismo, hubo incidencias relacionadas con levantamiento de tapas de registro de la red de saneamiento, probablemente debidas al exceso de agua, en la carretera del cementerio, avenida de Zaragoza, carreteras de la universidad, calle Madrid y Beloso Alto.