Morgan desembarca este jueves en Iruñea con su sonido propio para presentar The River and The Stone, su tercer trabajo de estudio. La banda madrileña despide un año intenso en el que ha girado con Fito & Fitipaldis, y todavía le espera, el 21 de enero de 2023, un directo en el WiZink Center de Madrid. La guinda para Nina de Juan, Paco López, David Schulthess y Ekain Elorza, batería del grupo, que ha charlado con DIARIO DE NOTICIAS con motivo de su concierto en la sala Zentral.
Vuelven a girar por salas, con el público cerca, formando parte del directo. ¿Cómo va a ser la cita de este jueves en Zentral? ¿O eso no se sabe hasta que se palpa la energía que hay allí?
Pues es la tercera vez que pasamos por Zentral, siempre nos habéis acogido en Iruñea de una manera espectacular, le tenemos muchísimo cariño, y estamos volviendo a experimentar lo que es tocar en salas, porque entre pandemia, disco nuevo, composición y que arrancamos la gira en teatros, han pasado casi tres años... y la verdad es que está siendo increíble volver a esas sensaciones de tener al público de pie, cantando, y nosotros también más sueltos... está siendo muy divertido. Y Zentral nos encanta, es una de nuestras salas favoritas, así que a tope.
Presentan su último trabajo, ‘The River and The Stone’, aunque tengo entendido que hay material nuevo, temas que no entraron en el disco. ¿Sonarán aquí este jueves?
Todavía no nos ha dado tiempo a preparar esos temas para los directos, pero teníamos ganas de sacarlos porque ya llevaba un año el disco en la calle, la época de composición de The River fue tan fructífera que teníamos un montón de canciones y algunas se quedaron fuera, igual por estilo... Porque con cada disco, y con cada concierto, siempre intentamos contar una historia, proponer un viaje. Y estas canciones se quedaron fuera de ese guion, y una vez que terminamos la gira con Fito, dijimos, ¿qué, hacemos un regalo y lanzamos estos temas? Pero no nos ha dado tiempo de ensayarlos como para tocarlos en esta gira, en futuros conciertos irán entrando. Ya vamos teniendo bastantes canciones obligatorias en los repertorios y no queremos pasarnos, no queremos hacer todavía conciertos de tres horas...
De nuevo unas Navidades de intenso trabajo para Morgan. Su música está claro que va bien para estas fechas.
Sí, llevamos cuatro Navidades de gira, es nuestra época más potente; no sé qué pasa pero se ve que a los promotores y a las salas les cuadra nuestra música con esta época. Yo estoy encantado porque encima me ha tocado todo cerca de casa, por aquí por el norte, Gasteiz, Bilbao, Burgos, Logroño, Iruñea... Soy de Berriz, al lado de Durango, así que me pilla cerca, puedo compaginar un poco con la familia.
¿Después de la pandemia se disfruta todavía más del directo?
Sí, sí, sin duda. Claro, yo nunca había estado tanto tiempo en casa, sin conciertos, sin ensayos. Llevo tocando toda la vida, desde pequeñito, y nunca había teniendo una época de tal parón. Te acabas acostumbrando, te acaba gustando incluso, ves que hay otra vida lejos de los escenarios, y te empiezan a entrar las dudas, los miedos, te preguntas: ¿me volverá a gustar estar todo el día en la carretera, salir, no tener un fin de semana libre, dormir poco, todas esas sensaciones, los nervios que no siempre son buenos? Porque hay veces que estás ahí en el camerino con todos esos nervios y dices: ¿pero qué necesidad tengo yo de meterme en este lío? Pero vuelves, subes al escenario y aunque no siempre sea increíble estar en el escenario, a medida que vas haciendo conciertos y vas recuperando esas sensaciones, te reafirma y dices: claro, esto es lo que me mantiene vivo, esto es lo que me hace levantarme de la cama todos los días. Esto que llevo haciendo toda la vida de una manera automática es lo que me da a mí la vida y las ganas de seguir adelante. Así que ha sido muy bonita la vuelta, además todo este año nos han pasado cosas increíbles.
“ Esta noche vamos a tope,Zentral es una de nuestras salas favoritas y otra vez nos recibe llena... ”
Han girado con Fito, y van a culminar el 23 de enero con el directo en el WiZink Center de Madrid. ¿Cómo se vive todo esto?
Pues lo de Fito ha sido otro regalo que nos ha dado la vida, la verdad. Solo tenemos buenas palabras hacia él, es la persona más generosa que he conocido en mi vida, y con nosotros se ha portado increíble. Sabíamos que le gustaba Morgan, nos invitó un día a comer para conocernos y un poco más adelante nos invitó a la gira, y no dudamos en ningún momento. Poder vivir una gira de ese tamaño desde dentro, con gente maravillosa, y nosotros, que es prácticamente imposible que vayamos a hacer una gira de pabellones nunca. Así que fuimos de cabeza. Ytocar en San Mamés en un día histórico para todos... Yo creo que eso está aún por asimilar. Y nos prepara también ahora para nuestro WiZink, nuestro pabellón. Ahí vamos, con todo. Hemos preparado algo muy especial. En Madrid siempre lo hemos hecho, cuando vamos a espacios grandes llamamos a nuestros amigos, la Golden Family, ya les hemos puesto nombre y todo (ríe), y vamos a estar acompañados por coristas, por una sección de vientos y por una sección de cuerdas, así que vamos a ser unos veinte en el escenario. Intentaremos que sea una noche especial para todos, para el público y para nosotros también. Imprimirle un poco de emoción para que sintamos que estamos haciendo algo único ese día.
Esta crisis y el confinamiento en concreto están de alguna manera en el último disco, aunque la pretensión que tenían era desmarcar ese trabajo de esa realidad, y que dentro de equis años, al escucharlo, no tuviese que remitirnos a la pandemia. Y se ha conseguido, porque despierta sentimientos y emociones atemporales, universales.
Totalmente. Intentamos que no afectase la situación, que no quedase muy marcado como el disco de la pandemia. Estando el mundo como estaba, cuando acabó el confinamiento nos autoconfinamos en una casita pequeña en la sierra de Madrid, juntamos allí los instrumentos y nos aislamos. Y este disco ha sido como una barquita de salvamento; estábamos ahí aparte, mientras el covid arrasaba con todo, nosotros en nuestra burbuja de protección, y nos ayudó a pensar en el futuro, en que estas canciones íbamos a poder tocarlas ante un público, pensábamos en un futuro esperanzador. Y ahora escucho esos temas y me recuerdan a esos días en ese salón, tocando entre amigos y pasándolo bien en un momento malísimo para todo el mundo.
Aludiendo al título del disco, si Morgan es la piedra y la industria musical ese río que va cambiando, que a veces va en una dirección, a veces en otra, ¿cuál diría que es la esencia permanente que les hace manterse como banda fuerte, viva?
La amistad que tenemos entre nosotros y el saber que somos unos privilegiados, que es un milagro lo que nos está pasando; tener eso muy presente todos los fines de semana o todos los días que nos juntamos. Es difícil mantener una banda, tener todos la misma filosofía, es muy muy difícil remar todos a una, es muchísimo trabajo, hay muchas ansiedades, muchos nervios, muchos estreses..., pero el hecho de que seamos amigos desde hace años, de que seamos todos conscientes de cuáles son los puntos que nos unen, eso es lo que yo creo que nos mantiene vivos. Y ser conscientes de que somos unos afortunados. Lo hablamos entre nosotros, esto es una locura, mañana tocamos en Iruñea y está llena la sala, por tercera vez, haciendo canciones en inglés, sin ninguna intención de nada más que pasarlo bien, porque es la filosofía que seguimos: ¿nos gusta esta canción?, pues adelante. Yo creo que ahí está el secreto.
“ Girar con Fito ha sido un regalo, una experiencia increíble que todavía está por asimilar ”
Son tiempos dificiles para sacar un disco adelante, aunque buenos tiempos para el directo.
Eso es. Y más difíciles para una banda como ésta porque lo hacemos todo nosotros, competimos contra los gigantes, y sacamos el disco y no sabemos si la gente se va a enterar de que sacamos el disco. De hecho, nos ha pasado. Que nos dicen: ahí va, ¿pero tenéis disco nuevo? Sí, es que con el año que hemos estado parados nos hemos quedado sin dinero para promocionarlo... Hacemos lo que podemos. Poco a poco vamos ganando terreno, labrando nuestro camino y no es fácil competir contra todos, pero ahí vamos, con ilusión y sin quejarnos mucho, porque demasiado bien nos va.
A Morgan le mueven la emoción y el sentimiento, y la música como experimentación y aprendizaje continuo. ¿En qué momento se encuentra la babda a este respecto?, ¿hacia dónde le gustaría ir a partir de ahora?
Pues por ahora seguimos en fase de disfrutar lo que nos está dando The River and The Stone. La composición de este disco fue larga y nos tomamos nuestro tiempo, ahora está floreciendo y todavía estamos mirándolo y disfrutando de lo que estamos viendo. No solemos planificar mucho las cosas, poco a poco ya irán saliendo las conversaciones, si hacemos otro disco, si paramos, si no, si lo hacemos mientras estamos de gira... No sabemos muy bien qué va a pasar, pero me imagino que una vez que pase el WiZink, ahí ya podremos empezar a pensar en otras cosas. Pero probablemente sigamos la misma filosofía de decir: vamos a juntarnos, vamos a ir sacando ideas y las diez, doce o nueve que más nos gusten a los cuatro, pues para adelante, y cuando esté listo lo sacaremos. Sin intentar seguir ninguna moda, ni una agenda cerrada ni una estrategia.
Claro, al final eso resta en libertad y creatividad.
Sí, sí. Totalmente. No tenemos discográfica, bueno, nosotros somos nuestra propia discográfica, así que no hay ningún contrato que cumplir, ninguna agenda. Esa libertad es clave. Lo contrario puede ser contraproducente, ahí empezaría a mandar más la industria que lo que nos mueve a nosotros.