La candidata de Sumar a lehendakari, Alba García, abogó ayer lunes por aplicar medidas que movilicen “unas 15.000 viviendas vacías” que “están en manos de grandes tenedores y fondos buitre”, para que haya más oferta en alquiler.
García, acompañada por el representante de Ezker Anitza-IU Iñigo Martínez detalló un informe sobre la problemática vasca del acceso a la vivienda realizado por una fundación denominada Estudios Críticos, porque es un asunto “crucial” para esa formación ante las próximas elecciones autonómicas.
Ese estudio dice analizar las políticas públicas de vivienda y propone medidas para mejorar la situación, ya que “en Euskadi la ley de vivienda ni se ha desarrollado ni se aplica por irresponsabilidad del PNV y del PSE-EE”, denunció.
Para hacer frente a ese problema, Sumar propone “movilizar la vivienda vacía” lo que “implica poner más de 15.000 viviendas que están vacías para el alquiler”.
“No hay que alarmarse porque esto no implica que tenga una segunda vivienda se la van a quitar. No va de eso, sino que implica a grandes tenedores y fondos buitre” que en Euskadi “pueden acumular más de 100 viviendas en propiedad”, aclaró.
Regular los precios
García defendió, en segundo lugar, “regular los precios de los alquileres” y además, planteó crear “más de 2.000 viviendas dotacionales para final de la legislatura”.
“Con tan solo esas tres medidas se puede mejorar la vida de 32.000 hogares”, opinó.
En la misma lídea de EH Bildu de ponérselo difícil a las personas hipotecadas, la candidata de Sumar abogó por aplicar medidas fiscales “en la lógica de fomentar el alquiler”. “Vivimos en un país en el que hay mucha cultura de compra”, porque “alquilar es una locura”, sentenció.