Los amantes del surf y del skate disponen ya de un espacio donde dar rienda suelta a su pasión por los deportes de deslizamiento durante los 365 días del año, independientemente de las condiciones meteorológicas. “Es una ola que se mantiene las 24 horas del día los siete días de la semana”, proclamó Connor Surgenor, gerente de Drop Indoor Sopela, la nueva pista de surfskate más grande de Europa ubicada en la calle Olabide 17.
Un proyecto que aúna las disciplinas de deslizamiento en Sopela, referente del surf, y que llega para divulgar la pasión aplicada a las cuatro ruedas entre surfers y skaters. En este sentido, la iniciativa surgió como una necesidad y a la vez una oportunidad. “Los socios son los propietarios de las escuelas de surf de Sopela y aquí durante el invierno las condiciones meteorológicas limitan mucho el surfing. Además, vimos que había una demanda en auge de surfskate”, precisó Connor.
Las nuevas instalaciones cuentan con más de 2.000 metros cuadrados de pistas de skate y surfskate y ofrecen un espacio donde entrenar y complementar la tecnificación de los entrenamientos de las escuelas de surf, mejorando el nivel, estilo, maniobras, trucos, etc. Como la unión hace la fuerza, un grupo de socios formado por David Elexpuru, Javier Berasategi, César González, Gorka Yarritu, Gonzalo Irigoras y Patxi Pardiñas han apostado por “ofrecer una experiencia única”, un skatepark con la mayor zona de surfskate del continente que cuenta con diversas áreas como waveramp, pump track, tube riding zone, diferentes áreas y módulos de street, spines y “un jugoso bowl para carvear sin límites”, explicaron.
Por su parte, el alcalde de Sopela, Josu Landaluze, se mostró satisfecho porque el pabellón industrial recupere la actividad y albergue un negocio relacionado con la industria del surf, un sector estratégico para la localidad. “La industria de Sopela es el surf y el turismo desde el punto de vista deportivo y empresarial”, señaló.
Pero, ¿qué es eso del surfskate o surf en asfalto? Es la razón de ser de este proyecto y la joya del indoor es la woodwave que preside el skatepark, una ola de madera “única en el mundo”, según apuntó la periodista Ana Urrutia, maestra de ceremonias, quien precisó que estas instalaciones permiten “tener la misma sensación que existe en el agua sobre la tabla” pero empleando “un patín especial”. No obstante, “la técnica es la misma que cuando surfeamos en el agua”, aseguró. Un centro de tecnificación que ofrece “oportunidades increíbles” para surfear después en el agua “mucho mejor”. Un entrenamiento perfecto para “cuando la mar está tranquila de mayo a septiembre y queremos preparar las borrascas de otoño invierno aquí se puede entrenar y mejorar la técnica y el estilo”, destacó. También es idóneo para aquellas personas que les gustaría surfear “pero la mar les da respeto. Las posibilidades son infinitas”, agregó.
Clases
Sobre esta línea, para aquellas personas que se quieran sumar a la ola de los deportes de deslizamiento, en el centro disponen de cursos de skate o surfskate adaptado en función de la edad o nivel. También disponen de actividades para grupos y sesiones libres donde poder sumergirse en una gran variedad de rampas diseñadas para la práctica del skate.
Una pasión por las cuatro ruedas que está de moda. “El skateboarding es una de las actividades extraescolares más solicitadas en la actualidad. La llegada de esta modalidad a los Juegos Olímpicos de Tokio y la llegada del surf en asfalto o surfskate, ha despertado el interés de niños y adultos de todo el mundo”, concluyen.
INSTALACIONES
Street. Una zona de rampas y módulos adecuados a todos los niveles.
Bowl. Las diferentes formas y tamaños de los bowls permiten realizar desde giros en transición hasta grindar sobre el pool coping.
Waveramp. Una ola de madera diseñada para perfeccionar la técnica del surf sobre el skateboard.
Domo. Es un espacio polivalente donde se llevarán a cabo diferentes actividades como, por ejemplo, formaciones, masterclases, talleres, cumpleaños, etc.