Están acostumbrados a abrirse paso entre las multitudes. A presentarse colmados de coros y ovaciones, rodeados de luces, desbordantes de colores, con capas y coronas, antorchas y escuadras moriscas capaces de trasladar a otros tiempos. A otra época. Rebosantes de alegría, Sus Majestades de Oriente han llegado algo cansados porque el viaje este año ha sido más largo, si cabe. Y es que se ha hecho esperar: el año pasado supo a muy poco y el anterior prácticamente a nada, así que había acumuladas unas ganas tremendas de dar y recibir abrazos, regalos y caramelos. De que los txikis se sentaran en sus rodillas para pedir, como siempre, los mejores deseos. Que son más grandes si son compartidos.
A Zizur y a Villava han llegado a caballo. En Burlada, hasta el puente viejo, en moto. Con su estela de carrozas, pajes y carros con regalos, mano arriba saludando bajo la lluvia de dulces, también en Noáin, Egüés, Beriáin o Barañáin han hecho su aparición estelar como prolegómeno a una noche de nervios para los más pequeños.
En municipios como Burlada han traído novedades como una escuadra morisca sumergida en un desfile que contó, también, con globoflexia (varias personas realizaron formas de todo tipo con los globos para repartir a los niños y niñas) y una batukada a cargo del alumnado de la Escuela de Música local, junto a sus padres y madres. Reyes, pajes y figurantes han llevado sus zurrones repletos de caramelos, acompañados también por payasos que han animado el ambiente con su particular espectáculo. La Asociación Desenfoque, dedicada a la fotografía –se encarga también de las imágenes de la cabalgata de manera desinteresada– ha sido la encargada de entregar a Sus Majestades las llaves de la ciudad este año en un evento en el que participan decenas de personas. “Estábamos con muchas ganas, el año pasado había muchas restricciones, no pudimos bajar de las carrozas ni interactuar ni lanzar caramelos ni realizar la adoración al niño. Este año la gente se ha involucrado muchísimo, y está mucho más nerviosa porque quieren que todo salga bien”, ha confesado Gaspar, que se parecía sospechosamente a Pedro Jimeno. Estuvo acompañado por Baltasar (con un aire a Asdrúbal Osoria) y Melchor (con cierta semejanza a Óscar Alcázar).
Cerca, en Villava, los Reyes han hecho el recorrido a caballo por el puente de la Trinidad hasta la Casa de Cultura para montar después en sus carrozas. Han estrenado una nueva con danza oriental, al estilo de castillo árabe, que ha sido todo un éxito. Acompañada del carro con carbón, los juguetes, bicicletas, regalos y las carrozas. Arlequines, elfos, zancudos, enanos, playmobil, antorcheros, txistus, batukada y hasta trompeteros de la escuela de Burlada que han acudido por primera vez, tal y como ha avanzado la secretaria de la agrupación que organiza la cita en colaboración con el Ayuntamiento, Montse Martínez.
En Noáin, también sin restricciones, han vuelto a realizar el encuentro en el polideportivo con cada uno de los txikis que se acercó a contarles sus deseos (el año pasado no se pudo hacer), además con un fondo especial porque han estrenado escenografía inspirada en el acueducto del municipio. “Se ha movilizado todo el pueblo, participan muchísimos colectivos, más de mil personas”, ha reconocido desde el área de Cultura Elena Izco. Han desfilado 5 carrozas, la de los de Oriente y la estrella, además de la fábrica de juguetes, que ha conquistado también todas las miradas.
En Zizur han tenido sus complicaciones y desde el Ayuntamiento hacen un llamamiento animando a los vecinos y vecinas a participar, ya que este jueves no ha habido carroza con regalos por falta de voluntarios y voluntarias, aunque eso no ha impedido que la cita haya sido un éxito. Y que se les esperara con emoción, con gritos y con alegría, como en toda la Comarca de Iruña.
Abanderados, zancos, malabaristas, las trikitixas, la banda de música municipal y la txaranga Galtzagorri, entre otros colectivos, han acompañado a unas carrozas renovadas con más adornos, iluminación, nuevos tronos y vestuario para Sus Majestades, que han llegado a caballo desde El Pinar (acto que fue suspendido en 2020 y 2021 por la pandemia). Han acudido a la parroquia San Andrés del Casco Antiguo para realizar la adoración al niño y han sido recibidos después por el alcalde, Jon Gondán, para continuar por las calles y con las pertinentes paradas para que los más txikis se suban a saludarles.
En Barañáin este año Melchor (que se parecía a Emilio Martínez) ha ido de negro en recuerdo de su predecesor (se daba un aire a Juanjo Antoñanzas), que falleció en julio después de 13 años participando activamente en este acto, y en una cabalgata muy emotiva que ha contado con honores para él y un sentido acto en el Auditorio. Gaspar (idéntico a Víctor Barandalla) y Baltasar (clavado a Ben Hamed Bamba) han estado acompañados de las dos carrozas infantiles con temática de las películas 'Buscando a Nemo' y 'Shrek', además de por el grupo de danza Arkadia y el de patinaje de Lagunak.
Han participado por primera vez niños y niñas de 3 años, “y el año que viene tendremos que ampliar las carrozas, porque este año se ha apuntado muchísima gente”, ha dicho, animada, María Ángeles Aristu, fiel promotora de la cita. “Antes venían niños y niñas con sus padres y este año se han unido por primera vez abuelos y abuelas”, ha reconocido contenta. Todo es poco para ese cóctel de tensión, ilusión y magia que, sea donde sea, no decepciona nunca.