Se esperaba con expectación el consejo de administración que Talgo tenía convocado para este martes y la verdad es que no defraudó. Además, de anunciar un beneficio neto de 14,6 millones de euros en el primer semestre duplicando el beneficio anterior, los rectores de la compañía de fabricación de trenes que tiene su factoría principal en la localidad alavesa de Rivabellosa, han anunciado su rechazo absoluto a la oferta de Skoda e insistieron en que lo mejor para el futuro de la compañía es aceptar la opa del grupo húngaro. Justo la oferta que rechaza de plano el Gobierno español que ya ha anunciado que prorrogará durante tres meses más su decisión.
El consejo de administración de Talgo rechazó la oferta de unión lanzada por el grupo checo Skoda para combinar sus negocios, al considerar que solo la opa del grupo húngaro Magyar Vagon garantiza los recursos financieros e industriales necesarios para afrontar el presente y futuro de la compañía.
Así lo trasladó la compañía en una misiva enviada a Skoda y que Talgo publicó íntegramente en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). “Habiendo tenido en cuenta el interés de los accionistas de Talgo, sus empleados y otros interesados, el consejo considera que no es el momento adecuado para explorar alternativas a una opa que garantiza los recursos financieros e industriales que permitirán a Talgo afrontar sus retos presentes y futuros”, dice la misiva.
De esta forma, el consejo de Talgo se muestra públicamente y por primera vez contrario a la oferta alternativa de Skoda, para volver a decantarse claramente por la húngara, a pesar de que el Gobierno español ha reiterado por activa y por pasiva que no aprobará esta última oferta, por estar Magyar Vagon participada al 45% por el Gobierno de Orbán. Precisamente, en sus últimos resultados semestrales, la compañía apuntaba al “reto” que afronta actualmente de optimizar su capacidad industrial, algo que espera conseguir con su venta al grupo húngaro.
Duplica sus beneficios
En concreto, Talgo está analizando su entrada en nuevos contratos durante los próximos 24 meses por valor superior a los 6.000 millones de euros, que le permitirían seguir expandiendo su tecnología en mercados actuales y nuevos. En este sentido, el 64% de los proyectos potenciales se identifican en el mercado europeo, y un 31% adicional en países de Oriente Medio y norte de África.
Las cuentas también arrojan un beneficio neto de 14,6 millones de euros, lo que supone un incremento del 108% respecto al mismo periodo del año anterior, y unos ingresos de 346 millones de euros, un 20% más debido a su estrategia comercial de los últimos ejercicios y a la fuerte actividad industrial en fabricación de la compañía protagonizada por proyectos tanto estatales como internacionales, como los pedidos de DB (Alemania), DSB (Dinamarca), y Renfe (España).
No obstante, la compañía cree que el “reto” que afronta actualmente es el de optimizar su capacidad industrial, algo que espera conseguir con su venta al grupo húngaro Magyar Vagon.