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Suena una llamada en tu teléfono y en la pantalla ves reflejado un número que no tienes identificado en tu lista de contactos. La mayoría de las veces optas por no descolgar ante la sospecha de que pueda tratarse de una llamada comercial o, lo que es peor, por el temor a ser víctimas de una estafa.
Si esperas una llamada, no te quedará otro remedio que descolgar y cabe la posibilidad de que descubras con inquietud que, pese a tu saludo, nadie contesta al otro lado del teléfono. Se trata de las conocidas como llamadas fantasma o robollamadas.
Qué es una 'llamada fantasma'
Afortunadamente, detrás de una llamada de un número desconocido no siempre hay una estafa. Puede tratarse de alguien que necesita contactar con nosotros, de una equivocación o tal vez de una llamada intencionada realizada por un sistema automatizado.
En este último caso, una máquina es la encargada de llamar a miles de números al azar. Estas llamadas fantasma son realizadas por empresas comerciales con el fin de comprobar qué números están activos para incluirlos en bases de datos y después llamarles.
Si el usuario descuelga, ya saben que el número está activo y que es muy probable que si después recibe la llamada contestará, aún sabiendo que se trata de un número desconocido. Y cuando le vuelvan a llamar y conteste, ya no encontrará el silencio como respuesta, sino que habrá un comercial al otro lado del teléfono que tratará de venderle cualquier producto.
Nadie contesta
Los expertos aseguran que estas llamadas realizadas por un bot automatizado deberían pasar a un operador humano. Sin embargo, muchas veces la llamada no va más allá de este primer paso y es precisamente entonces cuando descolgamos y nadie contesta al otro lado.
Si el sistema automático supera el límite de llamadas que los teleoperadores pueden atender, lo que recibirás será una llamada vacía. No llegarás a hablar con nadie porque lo único que hay realmente al otro lado es una máquina.
Otro motivo por el que se puede producir el corte de la llamada es que, al no obtener una respuesta inmediata, el emisor cuelgue rápidamente, en cuyo caso, al no llegar a escuchar la voz del usuario, es probable que no vuelvan a molestarle.
Cómo identificar las 'robollamadas'
Una de las formas de saber si se trata de una robollamada es fijarse en el número de teléfono, ya que la mayoría empiezan por 911 11. Son ya muchos los smartphones que identifican cuándo se trata de un posible spam y así lo indican en el mismo momento en el que se está recibiendo la llamada. En este caso, se puede bloquear ese número de teléfono y la próxima vez que te llame ni siquiera te sonará.
Robo wangiri
Hasta aquí hemos visto la versión molesta pero inofensiva de recibir una llamada y que nadie conteste. Sin embargo, también cabe la posibilidad de que detrás de dicha llamada haya un intento de estafa: se trata del robo wangiri.
El engaño consiste en que recibas al día muchas llamadas de teléfono de un mismo número cuyo tono dure tan poco que no te dé tiempo a responder. Si la curiosidad te lleva a devolver la llamada, es posible que acabes siendo víctima de una estafa; el sistema de tarificación que te aplicarán será tan elevado que acabarás pagando un precio desorbitado.
En el momento en que marcas ese número de teléfono y esperas a que alguien conteste, comenzará la estafa: por cada minuto que permanezcas en línea, el coste subirá a gran velocidad. No serás consciente del desfalco hasta que veas en la factura que te han cobrado un importe muy superior al de cualquier llamada habitual.
Ahora que sabes qué hay detrás de las llamadas fantasma, ya no te parecerán tan inquietantes. Una buena opción para detectarlas es no coger la llamada a la primera y comprobar el número en internet. Los comentarios de otros usuarios te pueden ayudar a detectar más de una robollamada.