Gipuzkoa

"Te lo voy a decir por tercera vez, que me estás tomando el pelo, que lo he dejado en la esquina, que no lo he dejado muerto"

Segunda jornada del juicio por el asesinato a puñaladas de un hombre en Donostia marcada por las salidas de tono del acusado, sobre todo, dirigidas al fiscal
"Te lo voy a decir por tercera vez, que me estás tomando el pelo, que lo he dejado en la esquina, que no lo he dejado muerto"
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03:28

Segunda sesión en la Audiencia Provincial de Gipuzkoa por el asesinato de un hombre a puñaladas en marzo de 2020 en Donostia. Una sesión marcada por las múltiples interrupciones y salidas de tono del acusado, tanto durante el turno de intervención como durante el interrogatorio del fiscal. A este le ha dirigido palabras como "que ya te he dicho pesao, me estás tratando de tomar el pelo ¿te crees que soy tonto" y a sus preguntas respondía en tono desafiante afirmando, al ser preguntado por su contacto con la víctima en la plaza Cataluña que "te lo voy a decir por tercera vez, que me estás tomando el pelo, que lo he dejado en la esquina, que no lo he dejado muerto". Haciendo caso omiso de las advertencias de la presidenta de la sala, incluso acusaba directamente al fiscal de "querer hacerle explotar".

Al margen de las formas, ha sido una jornada que prácticamente parecía de conclusiones, ya que los abogados adelantaban gran parte de las pruebas que el jurado popular tendrá que analizar hasta el 7 de marzo. En el caso de la Fiscalía, por ejemplo, relataba que "existe un testigo (un hombre que paseaba a su perro), que vio a dos hombres hablando amistosamente, que en un momento dado uno le dijo al otro 'Vale, perdona, perdona', inmediatamente después el otro comenzó a lo que le pareció, golpearlo, y el otro cayó al suelo". Fiscalía que también argumentaba que el origen del conflicto fue que la víctima "incitó a la chica con que estaba el acusado a bailar en un pub", lo que provocó una reacción "extremadamente violenta" en el acusado que, fue a su casa, "se cambió totalmente de ropa, tomó un cuchillo de grandes dimensiones y regresó al pub". 

La acusación particular, por su parte, ha querido destacar que "la versión del acusado ha cambiado en función de haberse visto acorralado". "Ha pasado de no recordar nada, a alegar consumo de drogas y problemas psiquiátricos". Algo que, en opinión del abogado, ha sido una "maniobra burda y torpe". Además, ha argumentado que además de asesinato con ensañamiento y alevosía, solicitarán los agravantes de abuso de confianza y superioridad porque, en el momento de los hechos, la víctima se encontraba bajo los efectos del alcohol. 

Tras las acusaciones, era el turno de la Defensa que, tras mostrar las condolencias a la familia de la víctima, ha recordado reiteradamente al jurado que "lo primero que debe hacerse es demostrar la culpabilidad del acusado". En este sentido, acusaba a la Fiscalía de haber presentado, "prácticamente, un informe de conclusiones". En este sentido, alegaba que se debe comprobar si existen "pruebas suficientes" y afirmaba que su cliente afirma no recordar haber matado a una persona y que, por ello, "debe defender la libre absolución". "Si se probara la culpabilidad -añadía-, entonces defenderemos los atenuantes de trastorno psicótico y consumo de cocaína, que están acreditados". 

Un juicio con jurado popular en el que hay una segunda persona imputada: la chica que acompañaba al acusado la noche de los hechos y que ambos han defendido, "no era su novia". Ella está imputada por encubrimiento ya que, tal y como recordaban las acusaciones, "se negó a declarar como testigo y sólo lo hizo cuando la Ertzaintza la llamó como encausada". En su turno, la abogada de la mujer ha relatado que "tras acudir juntos a la habitación que el acusado tenía alquilada en la Gran Vía, este abandonó el domicilio bajo el pretexto de que iba al baño". 30 minutos después habría regresado "ensangrentado y con lo que a ella le pareció un cúter cubierto también de sangre". La abogada ha explicado que la chica quedó en "estado de shock" y que "por miedo" actuó con "toda la normalidad posible hasta la mañana siguiente, cuando tomó el autobús para regresar a su domicilio". "Por miedo -continuaba-, no tuvo fuerzas para declarar hasta saber que el acusado iba a ingresar, al menos, en prisión provisional". Algo que la abogada calificaba de "lógico" y "comprensible".

Todos los interrogatorios al acusado han sido confusos e imprecisos, sin un relato claro de los hechos y varias contradicciones en torno al consumo de drogas o hecho que recordaba o no recordaba. 

Este juicio continuará en la Audiencia Provincial de Gipuzkoa hasta el próximo 7 de marzo. En las jornadas siguientes se escuchará la declaración de los agentes de la Ertzaintza, testigos, peritos y se analizarán las pruebas periciales. 

Puedes escuchar un resumen de la sesión de este martes en el audio

22/02/2022