“Tenemos ya que espabilar”. La máxima es rotunda y la pronuncia Javier Olaizola, técnico de un Arenas que pierde gas y que, por primera vez en este curso, sale de los puestos de play-off después de verse inmerso en una trayectoria decadente. Son ya cuatro las jornadas que acumula el cuadro rojinegro sin ganar –Gernika, Alavés B, San Juan y Mutilvera– y en las que, como agravante, no ha conseguido ver puerta, un debe que incomoda a un exigente Olaizola, como así lo reiteró tras la derrota que sufrió su equipo en Mutilva. “Hemos hecho una segunda parte horrorosa que nos ha costado el partido. Hemos estado muy mal en todos los aspectos”, expresó el preparador guipuzcoano, molesto con las prestaciones de sus pupilos: “No hemos tenido el control del partido en la segunda parte, no hemos sido capaces de dar tres pases seguidos, el nivel defensivo ha sido muy pobre y es muy difícil así”.
El Arenas, también es cierto, compareció en Mutilnova con cinco sensibles ausencias, todas ellas de hombres de matiz ofensivo, de lo que se lamentó Olaizola, aunque tampoco lo quiere utilizar como excusa. “Solo teníamos un jugador ofensivo en el banquillo, que era Goñi, y los demás eran todo defensas, Hemos intentando cambiar el sistema para tener más llegada, pero no ha salido”, reflexionó el técnico arenero, que reclama una reacción para regresar a la senda de la victoria: “ Toca seguir trabajando, ser humildes, tenemos ya que espabilar. Llevamos partidos que nos cuesta hacer gol, hoy (por el domingo) hemos generado poco, pero el déficit más grande lo tenemos en el plano defensivo, ya que nos hacen muchas ocasiones de gol”. Así las cosas, el Arenas confía en salir de esta especie de minicrisis en el duelo que cierra la primera vuelta de este grupo II de Segunda RFEF, en el que recibe el domingo en Gobela, a las 17.00 horas, al Atlético Cibornero, al que supera en cuatro puntos.