Betis 2 (2)
Barcelona 2 (4)
BETIS: Claudio Bravo; Aitor Ruibal (Min. 78, Sabaly), Luiz Felipe, Pezzella, Miranda; Guido Rodríguez (Min. 85, Guardado), Canales (Min. 46, William Carvalho); Luiz Henrique, Fekir (Min. 91, Loren), Rodri (Min. 81, Juanmi); y Borja Iglesias (Min. 67, William Jose).
BARCELONA: Ter Stegen; Sergi Roberto (Min. 78, Christensen), Araujo, Kounde, Alba (Min. 78, Marcos Alonso); De Jong (Min. 63, Busquets), Pedri, Gavi (Min. 96, Kessie); Raphinha (Min. 85, Ansu Fati), Lewandowski y Dembélé (Min. 63, Ferran).
Goles: 0-1: Min. 40; Lewandowski. 1-1: Min. 77; Fekir. 2-1: Min. 93; Ansu Fati. 2-2: Min. 101; Loren.
Tanda de penaltis: 1-0: William Jose, gol. 1-1: Lewandowski, gol. 2-1: Loren, gol. 2-1: Kessie, gol. 2-2: Juanmi, para Ter Stegen. 2-3: Ansu Fati, gol. 2-3: William Carvalho, para Ter Stegen. 2-4: Pedri, gol.
Árbitro: Del Cerro Grande (Comité Madrileño). Amonestó a Fekir, Luiz Henrique, Guido Rordríguez y Miranda, y expulsó a Guardado por doble amarilla (Min. 112 y Min. 118) en el Betis. Por parte del Barça fueron amonestados Sergi Roberto y Raphinha.
Incidencias: Segunda semifinal de la Supercopa disputada en el estadio Rey Fahd ante 38.624 espectadores.
La Supercopa la están dominando los porteros. Thibaut Courtois sostuvo al Real Madrid contra el Valencia y Marc-Andre Ter Stegen respondió con otra gran actuación, deteniendo dos penaltis en la tanda frente al Betis después de un empate a dos goles para darle a Arabia Saudí su primer clásico en una final.
Lewandowski, sancionado en LaLiga con tres partidos, volvió, tras cumplir el primero, con ganas, aunque impreciso. Hasta para su gol necesitó dos remates y culminó así una galopada de Dembélé provocada por una magnífica maniobra de engaño en la salida de balón de Pedri, quien, con un movimiento de cuerpo y levantando la cabeza, hizo bascular a toda la presión en salida de balón del Betis al lado contrario donde iba a poner la pelota a Dembélé. Era el minuto 40.
Vivió el Barça en el alambre, sin poder controlar el partido como lo hizo en la primera media hora del mismo. Por ello, Xavi recurrió a Busquets, que fue suplente por sorpresa en el que, tras salir en el minuto 63, sumó su partido oficial número 700 con la camiseta azulgrana. Un parón en el que el técnico fue pitado, contrastando con el cariño que ha recibido desde su llegada a Arabia Saudí, donde jugó y dirigió partidos con el Al Sadd catarí, al quitar del terreno de juego a Dembélé, el más activo hasta entonces y el más querido por la afición local.
Sin él en el campo, se apagó la chispa en ataque del Barça y ante la incertidumbre, de un partido abierto pero sin grandes ocasiones, la magia cambió de bando y Fekir tomó el mando, apoyado en un Luiz Henrique eléctrico arriba y voluntarioso atrás. Un recorte del segundo dentro del área, llevándose a tres defensas, propició el empate en el minuto 77 de Fekir, quien remató fuerte y duro al primer palo dentro del área. Esta vez no apareció Ter Stegen, pero a favor del Betis tardó cuatro minutos en repetirse la historia. Otro gol del Barcelona anulado, esta vez a Lewandowski por un fuera de juego previo de Ferran Torres. Acto seguido, los verdiblancos dispusieron de otra oportunidad para marcar en las botas de Juan Miranda, tras otra acción de calidad de Fekir, pero, como 24 horas atrás, el estadio Rey Fahd vio una prórroga.
Ansu Fati marcó en el minuto 93 con un remate de volea con la zurda, cruzado al segundo palo, que parecía decidir la prórroga a favor del equipo azulgrana, pero el Betis volvió a no rendirse, como el propio Loren, que fue quien igualó de nuevo el marcador. No jugaba el delantero desde el pasado 20 de agosto, sin estar en la lista de Pellegrini para la Liga Europa, 13 minutos en la temporada... y se inventó un taconazo, de espaldas en el área pequeña, para hacer el 2-2 y mantener la repetición del guion del Real Madrid-Valencia, la otra semifinal decidida también en la tanda de penaltis. Y, de nuevo, con un portero como gran protagonista. Ayer jueves le tocó a un Ter Stegen que detuvo dos penaltis, a Juanmi y William Carvalho, para lograr, junto al definitivo convertido por Pedri, que Arabia Saudí tenga su ansiado clásico en la final de la Supercopa.