El dato lo aportó un agente de la Ertzaintza durante el juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Bizkaia por la brutal paliza que sufrió Alex, el joven de Amorebieta el 25 de julio de 2021 y que le ha dejado secuelas cerebrales irreversibles. La policía autonómica tiene detectados actualmente sólo en Bizkaia, entre 400 y 500 chavales, mayores y menores de edad, que actúan en 15 grupos distintos,
En Onda Vasca analizamos en profundidad este fenómeno que aunque no debe generar un gran alarmismo social, sí merece una especial atención. Expertos policiales y judiciales coinciden en la necesidad de agilizar la burocracia y los juicios, para que en la sociedad no cale el mensaje de que hay impunidad con sus agresiones y robos.
El experto en seguridad y perito judicial en armamento y criminología, César Charro explicaba el perfil de los miembros de estas bandas juveniles. Algunos son menas, menores extranjeros con vidas muy complicadas que apenas tienen arraigo social y familiar. Otros muchos, explica, son jóvenes autóctonos, que a menudo tienen baja autoestima, que no estudian ni trabajan y que tienen poco vínculo familiar. Esos se ven seducidos por estos grupos emergentes, afirma, embriones de bandas criminales que están presentes en otros países y que ya han llegado a Euskadi. Entre ellos menciona a los ' tritinatarios, latin Kings, Bloods o Cripts.
"El 90% son gente muy joven, algunos lo dejarán pero habrá un 10% que pasarán a vivir de esto, del delito, de la marginalidad y pasarán a tener un estatus dentro de una banda y esto es lo preocupante", puntualiza Charro.
Una idea que comparte José Luis Mintegia, policía local de Getxo y miembro de la Asociación de Formación de Estudios Policiales. "Más allá de la desgracia que ha ocurrido con Alex, el tema de bandas juveniles no es lo que más nos preocupa. Por desgracia tenemos otras situaciones más complicadas y el fenómeno de las bandas no va a más", asegura Mintegia.
"Cuando se habla de grupos de 40 o 50 personas, la gente puede llegar a creer que tenemos 40 o 50 personas y son todos criminales y no es así. Tenemos a 3 o 4 que son los artífices de todo y los demás se dejan arrastrar. Nosotros no somos la solución. Es un problema cultural", resume.
César Charro comparte la opinión pero matiza. "Yo me puedo imaginar a un chico con la autoestima baja, malas notas, quizás de una familia desestructurada que de repente va con otros doce por el medio de la calle y la gente se aparta. Esa sensación de poder unido a la sensación de impunidad de que no me va a pasar nada haga lo que haga, en ciertos perfiles de personas es un atractivo muy poderoso. Es un poco lo que hay deslegitimar", remarca.
Impunidad
Una impunidad sobre la que el juez decano de Bilbao, Aner Uriarte, no ve un problema de los jueces. Señala que los jueces actúan aplicando el sistema garantista que está vigente en la actualidad. "Partimos de la base de unos procedimientos penales. En ocasiones cuando se tiene que aplicar el procedimiento penal a una banda organizada que comete un delito tan grave como este, es complicado porque partimos de la base de la presunción de inocencia de todos los detenidos. No soy quien debe decir cómo debe ser el procedimiento penal, aplicamos el que nos ha dado la clase gobernante", defiende el juez decano.
Añade además que el procedimiento penal que existe en el Estado es de los más "garantistas", mucho más cuando se trata de menores de edad. "No digo que se tenga que cambiar, digo que cuando hay que responder a este tipo de casos, tenemos que aplicar la ley presunción de inocencia", afirma.
En esta línea, el experto en seguridad Cesar Charro destacaba su preocupación porque un exceso de garantía para el delincuente pueda suponer una merma de garantías para el ciudadano que no entiende como alguien con largos historiales delictivos siguen en la calle, porque haya juzgados o cuerpos policiales saturados.
De la misma opinión es el policía local de Getxo, José Luis Mintegia. "Tenemos un problema que es la falta de medios y eso hace que los procedimientos no se agilicen pero a todos los niveles. Todas las policías estamos saturadas por los nuevos modelos que estamos importando delictivos, sobre todo, de internet y nos tiene saturados a todos. Es un problema de medios. Hay que invertir en seguridad", demanda.
Juicios rápidos
Los tres expertos consultados coinciden en valorar como muy positivos los juicios rápidos. La policía municipal de Bilbao fue pionera en esta colaboración con los juzgados que ahora se ha extendido a la Ertzaintza, para facilitar la prisión preventiva y que alguien pueda ser juzgado por ejemplo en una semana o dos.
En todo caso, hay que señalar que estos juicios rápidos, como nos explicaba el juez decano de Bilbao, sólo se pueden aplicar en casos de delitos con penas que no pueden ser superiores a 5 años, y siempre que los cuerpos policiales y esto es complejo, hayan conseguido reunir a tiempo todos los elementos de la investigación para que se dé ese juicio rápido.