Gipuzkoa

Tolosa: Piden que no se derribe la Villa del Sagrado Corazón

Áncora exige que se proteja el carácter histórico de este edificio de Tolosa
El edificio Villa Sagrado Corazón, donde está previsto construir 23 viviendas. | FOTO: N.G.

La Agrupación Cívica para la Conservación del Patrimonio, Áncora, ha solicitado al Gobierno Vasco que no permita el derribo de la Villa del Sagrado Corazón de Tolosa, en cuyo solar está prevista la construcción dos bloques de 23 viviendas con garajes incluidos de iniciativa privada, tras la aprobación por parte del Ayuntamiento del proyecto de urbanización.

“Tolosa no tiene ninguna villa histórica protegida, lo que constituye una anomalía difícil de justificar. El 14 de noviembre mantuvimos una reunión con la alcaldesa Olatz Peon, a la que pedimos la revisión urgente del Catálogo de Patrimonio, junto con un acuerdo de suspensión de derribos”, explican desde la asociación ubicada en San Sebastián. Lamentan, además, que Tolosa derribase el edificio de Corazonistas (Guillermo Izaguirre, 1922) para construir viviendas. “Ahora está sobre la mesa la polémica remodelación del Prado Pequeño, que desprecia su significación cultural y su carácter de jardín histórico”, añaden.

La Villa del Sagrado Corazón, que data de 1905, es el último de los chalets que originariamente distinguían el paseo San Francisco. Fue promovida por don Guillermo de la Lama, juez municipal, como residencia privada, y diseñada por el maestro de obras Julián Eizaguirre. Durante los últimos años ha servido como Dispensario de la Cruz Roja atendido por la Compañía de las Hijas de la Caridad y la labor de la Fundación Etxaniz.

Desde Áncora explican que el edificio está incluido en la Guía de Arquitectura de Gipuzkoa publicada por la Diputación Foral en 2004 y que la Dirección de Patrimonio del Gobierno Vasco analizó sus valores en 2008, proponiéndola para ser declarada Bien Cultural de Protección Media.

Asimismo, señalan que los técnicos de Urbanismo de Ayuntamiento de Tolosa “han apostado en todo momento por el mantenimiento de sus fachadas”, pero admiten que no pueden imponer su conservación, porque el inmueble no está recogido en el Catálogo Municipal.

Desde Áncora defienden que el edificio es uno de los mejores ejemplos locales dentro de su tipología y se sitúa en un entorno singularizado por este tipo de ordenación urbana. Constituye un original ejercicio de eclecticismo que combina la impronta neomudéjar (visible en el aparejo de ladrillo) y la estética modernista (barandado con el típico coup de fouet). Su interés compositivo-formal se concentra en la fachada y cierre delanteros, “que podrían salvarse si el Gobierno Vasco inicia el expediente de protección que tenía previsto incoar”.

22/12/2022