Carnavales tranquilos, llenos de humor, cargados de imaginación, con una asistencia masiva y sin incidencias extraordinarias. Este es el balance que ha realizado el Ayuntamiento en la reunión mantenida con los agentes, representantes de las agrupaciones y ciudadanía. Se constata que ya no es Astelenita la jornada en la que se reciben más visitantes, sino que el domingo se ha convertido en el día más multitudinario.
Los cambios introducidos este año han tenido buena acogida. La colaboración con la asociación de carrozas ha sido total y clave del éxito. Instalar un sistema eléctrico para las carrozas ha funcionado y se plantea ampliar la fórmula, ya que en Rondilla se cometieron infracciones. Aun así, se cree que es un largo camino a recorrer y hay que rebajar “todavía más” el volumen del Carnaval.
La sokamuturra en la plaza Zaharra y el alarde de txarangas en la plaza Euskal Herria, dos novedades de este año, han gustado en general.
Este año se han creado problemas en torno a la plaza de toros. El domingo los accesos se desbordaron, generando avalanchas y situaciones de peligro. Se tomaron medidas para el lunes y martes. El Ayuntamiento recuerda que el control del aforo es un imperativo legal: 2.973 personas en grada y tendido, y un máximo de 500 en el ruedo. Se plantea que en los accesos haya personal de seguridad y policía para una mejor organización y mantener el orden.
También trajo cola el tema de las invitaciones del Viernes Flaco y el Domingo de Piñata. La decisión de repartir invitaciones se tomó a última hora y el sistema no fue el adecuado. El espectáculo con vaquillas exige controlar aforos, por lo que se estudiarán alternativas. De todas formas, llama la atención el éxito creciente de los espectáculos taurinos: este año casi se desbordó el aforo en el toro del aguardiente, algo que no había ocurrido jamás.
También crece la cantidad de residuos que genera el Carnaval. El servicio de limpieza de las calles ha recogido 34,7 toneladas, una tonelada más que el año pasado, y el servicio de recogida de residuos de la mancomunidad ha recogido 14.879 kg este año, 1.697 kg más que el año pasado.
De cara al próximo año
En adelante, las prioridades serán la de limitar el volumen de la música y seguir promoviendo el consumo responsable de alcohol. Además, se estudiará la posibilidad de instalar limitadores de música, de limitar el horario y de ampliar el sistema eléctrico instalado este año solo en San Francisco.
Pero hay más retos sobre la mesa: generar menos residuos, mantener un sistema rotatorio entre plazas del municipio para la instalación de las txosnas, la posibilidad de dejar libre Rondilla kalea, la base y la ubicación de los puestos de venta ambulante y control de la venta ilegal, la insonorización de los generadores de los puestos de venta ambulante, la promoción de la música en euskera en carrozas y comparsas, y la opción de organizar el alarde de las charangas también el domingo de Carnaval.