Tour de Francia 2024: las dos caras del Macizo Central

El Macizo Central siempre marca. Deja huella. En la proa del Tour, el duelo entre Pogacar y Vingegaard ha rejuvenecido tras la respuesta del danés. La carrera francesa es otra tras la dura, veloz y penosa travesía por la tierra de los volcanes y los cráteres. En ese territorio, estalló el Tour de Ion Izagirre, que tuvo que abandonar, sometido por su cuerpo, tocado desde que asomara en Florencia el 29 de junio. El de Ormaiztegi sale del Tour después de soportar el dolor que le perdura de su fractura de costilla tras una caída en el Tour de Suiza, apenas dos semanas antes del comienzo de la carrera. El guipuzcoano, protagonista en la primera etapa del Tour, buscó varias fugas camino de Le Lioran hasta que se desgajó del grupo principal. Presentes lo problemas físicos, Izagirre abandonó. Recientemente renovado con el Cofidis por un curso, Izagirre, vencedor de dos etapas del Tour, tuvo que dejar la Grande Boucle con pena.

Las mala sensaciones también acompañaron el deambular de Pello Bilbao. En el pasado Tour logró un triunfo de etapa en Issoire. Esa era la idea para la presente edición. El recorrido por el Macizo Central parecía invocar la presencia del gernikarra en la lucha por encontrar un punto de satisfacción. Muy al contrario, Pello Bilbao sufrió horrores. Comprendió casi de inmediato que su cuerpo no estaba bien. Se descolgó en una jornada que comenzó al esprint en un terreno doliente. El vizcaino tuvo que renunciar a cualquier idea de sobresalir. Se refugió para cuidar su maltrecho cuerpo en el grupeta de los velocistas. El gernikarra finalizó a 38:02 de Vingegaard. Un pésimo día para Pello Bilbao, hundido en la clasificación. “Me sentía raro y estoy tocado, un poco enfermo. Intentaré darle la vuelta”, dijo el gernikarra.

EXCELENTE LAZKANO

Lejos del padecimiento de Ion Izagirre y Pello Bilbao, disfrutó Oier Lazkano, otra vez protagonista en el Tour. Brilló con una fuga en la jornada del Galibier y también en el sterrato de Troyes. En el Macizo Central mostró lo mejor de su catálogo en una escapada con grandes corredores. El problema para el gasteiztarra, que debuta en el presente Tour, fue que el líder quería regalarse una victoria. Esa actitud de Pogacar y su equipo rebajó sensiblemente la cotización de las opciones del alavés, que aún así realizó una propuesta muy atractiva. Zarandeó la fuga hasta dejarla en la mínima expresión. Mostró el poder de su motor y la ambición que le acompaña. Excelso Lazkano, que crece con celeridad. En el Macizo Central enseñó de lo que es capaz en la carrera más grande del mundo. También respondió Mikel Landa, que sigue séptimo en la general tras otra jornada sólida del alavés. Las caras del Macizo Central.