Un recorrido circular de 95,7 kilómetros de longitud y 9.777 metros de desnivel acumulado que recorre las comarcas de Goierri, Urola Garaia y Debagoiena y que consta de seis etapas, para hacer una al día. La ruta del queso Idiazabal, promovida por la Diputación foral de Gipuzkoa y homologada por la Federación Vasca de Montaña, es una opción inmejorable para adentrarse en el interior de Gipuzkoa y conocer algunos de los parajes más bellos del territorio.
Se trata de un recorrido con una dificultad media que no requiere preparación específica pero sí unas condiciones físicas mínimas, ya que la etapa más corta tiene 12 kilómetros y la más larga, 23. A través de sus seis trayectos, el senderista tiene la oportunidad de conocer el ciclo productivo de uno de los más reconocidos manjares gastronómicos del territorio: el queso Idiazabal, desde los pastos de la oveja latxa en los parques naturales de Aralar y Aizkorri-Aratz, hasta el mercado de Ordizia, donde puede adquirirse para su degustación.
Seis rutas para seis días
La primera de las rutas es la que une Ordizia con Segura, tiene 13 kilómetros de longitud y se tarda en torno a cuatro horas en completarla. Al abrigo del monte Txindoki, este recorrido permite disfrutar de algunos de los miradores más bellos de la comarca de Goierri, así como de Segura, una de las villas medievales por excelencia de Gipuzkoa, o de Idiazabal, el pueblo que da nombre a la ruta y donde se encuentra el Centro de Interpretación del queso Idiazabal.
La segunda ruta, Segura-Mirandaola, tiene 12,6 kilómetros y una duración de 4 horas y 25 minutos aproximadamente, y deja a un lado el queso para centrarse en el pasado minero de la zona. De hecho, la etapa concluye en la ferrería de Mirandaola, en Legazpi, tras haber pasado por Zerain y Mutiloa.
Para la tercera jornada nos espera el camino Mirandaola-Arantzazu, 12 kilómetros y 4 horas 45 minutos de camino que rodea el embalse de Barrendiola, atraviesa el paso de Biozkorna y Malla, para llegar al santuario, una de las cumbres artísticas del territorio.
La de Arantzazu-Etxegarate es una de las excursiones más largas y con mayor dificultad de esta ruta. Con sus 20,6 kilómetros y sus más de siete horas y media de duración, encara las campas de Urbia para llegar al paso de San Adrián, histórico camino de comunicación con Castilla, y atravesando Aizkorri, llegar a Etxegarate.
“ La etapa más corta (Mirandaola-Arantzazu) tiene 12 kilómetros, mientras que la más larga (Lizarrusti-Ordizia) consta de casi 23 ”
La quinta etapa separa Etxegarate de Lizarrusti, tiene 14,5 kilómetros y se completa en 5 horas 40 minutos. Aquí son visibles los vestigios del pasado en forma de túmulos y megalitos que van apareciendo en el camino, monumentos prehistóricos enmarcados en los más bellos paisajes.
Finalmente, encaramos la última etapa (Lizarrusti-Ordizia), que es la más larga: 22,93 kilómetros y 8 horas de duración. Se trata de una ruta habitual de los pastores de la zona. Atraviesa el embalse de Lareo para después de pasar por Zaldibia, llegar a Ordizia. Se trata de un camino sembrado de prados que acogen a cientos de rebaños de ovejas latxas cuya leche se convertirá luego en el suculento queso Idiazabal.
Información práctica
La ruta del queso Idiazabal consta de seis etapas pensadas para hacer en seis días
- Ordizia-Segura. 13 kilómetros de longitud, 3 horas y 55 minutos de duración y 335 metros de altitud máxima.
- Segura-Mirandaola. 12,6 kilómetros de longitud, 4 horas y 25 minutos de duración y 615 metros de altitud máxima.
- Mirandaola-Arantzazu. 12 kilómetros de longitud, 4 horas y 45 minutos de duración y 1.190 metros de altitud máxima.
- Arantzazu-Etxegarate. 20,7 kilómetros de longitud, 7 horas y 35 minutos de duración y 1.200 metros de altitud máxima. Dificultad alta.
- Etxegarate-Lizarrusti. 14,5 kilómetros de longitud, 5 horas y 40 minutos de duración y 950 metros de altitud máxima.
- Lizarrusti-Ordizia. 22,93 kilómetros de longitud, 7 horas y 55 minutos de duración y 885 metros de altitud máxima. Dificultad alta.