Tres activistas climáticos llenan de pintura el restaurante 'MasterChef'

El colectivo de desobediencia civil no violenta, Futuro Vegetal, ha llevado a cabo hoy una acción en el restaurante MasterChef de Madrid, un "acto vandálico", según ha denunciado este negocio, que ha provocado "graves daños materiales" en el interior de su sala.

Así lo ha denunciado este restaurante en sus redes sociales, quien ha informado de que el acto, que "atenta" contra sus trabajadores y clientes, se ha traducido en "graves daños materiales", ya que los participantes en esta acción han irrumpido en el local y han cubierto de pintura roja y negra un cartel con el logotipo del concurso de RTVE que da nombre al negocio.

Mientras que uno de los activistas grababa en video la acción, otros dos pintaban también el suelo y algunas mesas mientras exigían "cambios urgentes para evitar hambrunas de una escala jamás vista debidas al caos climático".

Las activistas, que han sido detenidas, además portaban unos menús elaborados por el propio colectivo, donde podía leerse "Menú basado en plantas" junto a un corazón.

Según reza en la web de este movimiento, se trata de un colectivo de desobediencia civil y acción directa no violenta (ADNV) que lucha "contra la crisis climática" y que le exige al Gobierno que "termine con las subvenciones a la ganadería y las emplee para promocionar alternativas social y ecológicamente responsables basadas en plantas".

Esta "acción" llevada a cabo en el restaurante Masterchef llega días después de que el pasado 5 de febrero tres de sus miembros se pegaran a la barra del restaurante del zoológico de Benidorm.

Las activistas arrojaron sangre falsa en el recinto para "reivindicar el fin de las subvenciones a la industria cárnica", la misma reivindicación que les ha llevado a actuar en este negocio de Madrid.

Entre otras acciones recientes también está la que el pasado 30 de enero realizaron tres jóvenes activistas del colectivo, ligado al movimiento por la justicia climática "Extinction Rebellion", que pegaron sus manos a la tribuna del Congreso de los Diputados para denunciar la política gubernamental respecto a las macrogranjas.

Otros de sus objetivos han sido empresas como Campofrío o supermercados de Carrefour.