Tres menores de 13 y 14 años, los autores de la profanación de una tumba en el cementerio de Pamplona

Tres menores de edad, de tan sólo 13 y 14 años, han sido identificados por la Policía Municipal de Pamplona como los autores de la profanación de una tumba registrada la semana pasada en el cementerio de la capital navarra. También se les atribuyen los daños ocasionados en diversas lápidas y el resto de los actos vandálicos ocurridos en las últimas semanas.

Los hechos más graves se produjeron el pasado jueves 13 de abril, cuando un trabajador del cementerio localizó un enterramiento en un columbario en vigor que había sufrido destrozos y de cuyo interior habían sido extraídos diversos restos óseos. El delito de profanación está recogido en el artículo 526 del Código Penal como "el que, faltando al respeto debido a la memoria de los muertos, violare los sepulcros o sepulturas, profanare un cadáver o sus cenizas o, con ánimo de ultraje, destruyere, alterare o dañare las urnas funerarias, panteones, lápidas o nichos será castigado con la pena de prisión de tres a cinco meses o multa de seis a 10 meses".

El día anterior a la profanación de la tumba, el miércoles 12 de marzo, ya se habían detectado diversos daños intencionados en nichos, e incluso en un panteón, así como flores quemadas en Berichitos. Hechos similares se produjeron el pasado mes de marzo, cuando ocurrieron varios episodios de la misma naturaleza.

A través de los barrotes

A raíz de esos sucesos, agentes de la Policía Municipal de Pamplona desplegaron un operativo especial durante los fines de semana con el objetivo de localizar e identificar a los autores de las incursiones en el cementerio. Fruto de las diversas investigaciones, se concluyó que se trataba de tres jóvenes que, aprovechando su delgadez, se introducían en el recinto a través de los barrotes de una de las puertas de acceso.

Con esta información, esta semana han podido ser identificados los tres implicados, que han resultado ser tres menores de edad, dos de los cuales cursan estudios en el mismo centro escolar en el barrio de San Jorge, de 13 y 14 años, y cuyas familias ya han sido informadas. Al no alcanzar la edad mínima de imputabilidad fijada en los 14 años, solo serán imputados por estos hechos quienes ya han cumplido esa edad, circunstancia que la Policía Municipal de Pamplona formalizará en los próximos días ante la Fiscalía de Menores.