Bajan las temperaturas y con el frío llegan fieles a su cita la gripe y los catarros. Hasta hace unos años, el diagnóstico de este tipo de enfermedades era más sencillo, sin embargo, desde finales de 2019, la irrupción del covid lo ha complicado todo extraordinariamente.
Este otoño se ha percibido un aumento de los casos de resfriados respecto a los dos años anteriores, en buena parte debido a la ausencia de las mascarillas, esa protección extra que nos ha tenido todo este tiempo apartados de los virus.
Aunque la mayoría de los síntomas del coronavirus se han ido manteniendo con el paso del tiempo, otros van cambiando según la variante del virus de la que se trata.
En este momento, dos subvariantes de BA.5 de Ómicron, la BQ.1 y la BQ.1.1, son las protagonistas y, aunque en la actualidad no llegan a representar ni un 3% de los casos en España, las autoridades sanitarias creen que, en torno a las fiestas navideñas, los contagios podrían dispararse y estas mutaciones, más contagiosas, convertirse en el origen de hasta un 50% de los casos.
Por ahora, no hay indicio de que estas subvariantes provoquen casos más graves, ya que si nos fijamos en el número de ingresos en unidades de cuidados intensivos, la cifra tiene una clara tendencia a la baja respecto a las olas anteriores.
Además, el período durante el que se presentan ahora los síntomas de la enfermedad es algo más corto que el de variantes anteriores, ya que duran de dos a cuatro días de media.
Un hombre con mascarilla junto a una representación de un virus.
Síntomas de las nuevas variantes
Al ser subvariantes de la BA.5 de Ómicron, estas nuevas formas del virus presentan unos síntomas similares a los de su antecesora: fatiga, tos, dolor de cabeza, fiebre, congestión, secreción nasal, estornudos, dolores musculares, vértigos, ahogo, disnea o falta de aire y pérdida de olfato y de gusto.
Precisamente, son esos síntomas de malestar general, fiebre y dolor de cabeza, tan comunes en los resfriados que abundan en esta época del año, los que nos pueden inducir a error y hacer que no nos demos cuenta de que lo que en realidad tenemos es covid.
En los últimos días, el inmunólogo y catedrático Alfredo Corell, citado por El Heraldo, ha apuntado a tres nuevos síntomas que podrían estar asociados a la variante BQ.1 y que podrían hacernos reconocer con mayor facilidad que estamos contagiados de covid. Estos son: pérdida de apetito, afonía y taquicardia.
De todas formas, y para salir de dudas, siempre podrás recurrir a las distintas pruebas que se venden en farmacias para detectar gripe A, gripe B y covid. Si das negativo en las tres, pero presentas síntomas compatibles con alguna o varias de estas enfermedades, lo más probable es que tengas catarro o un resfriado común.