El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que ha levantado la suspensión al suministro de 3.500 bombas pesadas norteamericanas (superior a 900 kilos de peso) a Israel que declaró en mayo del año pasado su predecesor, Joe Biden, como una medida de presión para forzar un alto el fuego en la guerra de Gaza, alcanzado finalmente el 15 de enero.
"Vamos a liberarlas hoy. (Israel) lleva esperándolas desde hace mucho tiempo y las llevamos almacenando desde hace mucho también", ha manifestado Trump en declaraciones a los medios norteamericanos que le acompañaban este pasado sábado en el avión presidencial. Trump esgrimió su razón en que "Israel las ha comprado".
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha agradecido al presidente estadounidense su decisión. "Gracias Presidente Trump por cumplir su promesa de dar a Israel las herramientas que necesita para defenderse, enfrentarse a nuestros enemigos comunes y asegurar un futuro de paz y prosperidad", ha hecho saber el mandatario en un mensaje publicado en su cuenta de X.
El ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar, también ha comparecido en redes sociales para agradecer al presidente estadounidense su decisión.
"Gracias, presidente Trump, por otra muestra de liderazgo al liberar el crucial envío de material de defensa a Israel. La región está más segura cuando Israel tiene lo que necesita para defenderse", ha manifestado el ministro.