Udalaitz y Besaide, panorámicas espectaculares de 360º

Ascendemos a una cima muy característica de las peñas del Duranguesado. Esta abrupta peña rocosa separa Bizkaia y Gipuzkoa, y se sitúa por encima de las cuencas de los ríos Ibaizabal y Deba. Realizamos la ruta desde el barrio de Udala.

DATOS PRINCIPALES

· Kilómetros: 10,82 km

· Desnivel positivo: 757+

· Duración: corriendo 2:00h / Caminar - correr: 2:45h / Senderismo 3:30h

DESCRIPCION

Mondragón (Arrasate) es una localidad guipuzcoana importante de la comarca de Debagoiena junto con Oñati, Arechavaleta y, cómo no, la capital de esta, Bergara. Resulta espectacular ver la localidad debajo de uno de los montes más impresionantes de esta provincia, incluso de todo el territorio, como es Udalaitz. A él ascenderemos en esta ruta que proponemos que parte del barrio de Udala. Este barrio, situado en la parte alta de Mondragón, además de ser nuestro lugar de partida le da nombre a la cumbre. Aprovechamos el parking de la zona de picnic y de la iglesia para dejar el coche y usar sus fuentes para recargar de agua nuestras botellas.

Tras un breve rodeo a la iglesia de Udala nos metemos ya en terreno de monte y seguimos las marcas amarillas y blancas que nos acompañarán en toda la primera parte, unos cuatro kilómetros sin apenas desnivel que servirán para ir calentando las piernas de cara a lo que vendrá a continuación.

Por este tramo más cómodo iremos faldeando toda esta peña perteneciente a Durangaldeko Harriak, donde una de sus cimas es el Udalaitz. El camino es muy sencillo de seguir, ya que durante todo el tramo está muy bien indicado en cada cruce con postes informativos y tan solo tenemos que seguir la dirección de Leintz Gatzaga, que es la que nos llevará, tras esos cuatro kilómetros, a nuestro primer punto de interés, tras girar a la izquierda en una fuente.

ENTRE BIZKAIA, ARABA Y GIPUZKOA

Este no es otro que Besaide, una pequeña cumbre que está ubicada entre el monte Udalaitz y el Anboto, a una altitud de 564 metros sobre el nivel del mar, que cierra el valle de Arrazola y donde se han venido explotando, bajo él, minas de cobre. La particularidad de este lugar es que en él convergen los territorios históricos de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, por lo que veremos la piedra que señala el lugar exacto de encuentro.

En dicho punto se ha construido el Monumento al montañero desaparecido, obra del arquitecto Luis Pueyo en la década de los 50 por encargo del Club Vasco Navarro de Montaña, dedicado a cuatro montañeros vascos que fallecieron subiendo al Mont Blanc. A escasos metros, bajando las escaleras, encontramos otro monumento, llamado Fuente de Vida, realizado por el artista japonés Yoshin Ogata en 1990, en lo que seguramente se trata de la imagen más famosa de este.

El sitio es realmente espectacular por todo el paisaje que nos rodea. Con un día abierto tener la posibilidad de observar tan de cerca esos dos gigantes de piedra con sus crestas, como son Udalaitz y Anboto, simplemente es indescriptible.

HACIA UDALAITZ

Bajamos de Besaide, realmente unos pocos metros, ya que como hemos comentado esta primera parte está prácticamente exenta de desnivel, para ir a por el plato fuerte de la jornada que no es otra que la ascensión a Udalaitz. Después de medio kilómetro recto tras pasar la fuente desandando el camino, llegamos a una gran bifurcación con varias opciones a seguir. Giramos a la derecha prácticamente 180º buscando la señal de Udalaitz y seguimos la pista marcada con pintura blanca y amarilla. La seguimos unos 200 metros y la abandonamos siguiendo recto. Ya vamos notando el desnivel pero todavía el terreno por el que nos movemos es sencillo. Otro medio kilometro más adelante llegamos a un nuevo cruce.

Esta bifurcación es donde hubiéramos llegado si al faldear no hubiéramos ido hasta Besaide. A partir de aquí el terreno se modifica de forma importante. La pista se transforma en sendero y el andar cómodo pasa a ser un andar lento y costoso por la aparición de piedras. Aquí también el desnivel continúa aumentando; se trata de la parte mas empinada. En primer lugar llegamos a la cima de Pozutxueta, de 775 m, desde donde continúa el exigente ascenso.

La recompensa a todo este esfuerzo llega con la aparición de la cueva de Udalaitz, también llamada De la Mari, ya que la mitología vasca sitúa en este paraje una de las múltiples moradas de la diosa Mari. Aquí tenemos la oportunidad de, desde su interior, poder contemplar o hacer la famosa postal con el Anboto en el medio. Desde la cueva, un último esfuerzo nos hace llegar a la cima en pocos minutos.

Estamos en la cima de Udalaitz (1.120 m) donde tenemos una panorámica espectacular de 360º con multitud de montes vascos: Anboto, Gorbea, Aizkorri, Txindoki, etc. Además de las vistas, en la cima tenemos una mesa de orientación y una pequeña cruz. Toca la parte delicada de la ruta de hoy: desde la cima bajamos, con mucha precaución, por la cresta, hacia la otra cruz, la del mirador de Udalaitz. Un poco antes llegamos a las ruinas del antiguo Santuario de la Asunción. Ya en el año 1570 Esteban de Garay menciona este recinto, donde los monjes eremitas vivían aislados de la vida mundana.

Nuevamente en el mirador las vistas son bellísimas, pero toca bajar, para lo que tomamos el sendero de descenso que nos lleva de forma rápida debido al fuerte desnivel negativo. En un kilómetro y medio entramos en un bosque de encinas muy característico de esta zona, que nos llevará al punto de inicio, iglesia de Udala, pasando por una antigua fuente-lavadero, donde podemos hidratarnos tras la excursión.