El Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermerdades (ECDC, por sus siglas en inglés) ha apuntado a un "agente infeccioso" como la causa más probable de la hepatitis aguda de origen desconocido en niños.
Tras la alerta la semana pasada por parte de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido, se han notificado otros casos en niños en el Estado español, Dinamarca, Irlanda y Países Bajos. Además, se han registrado nueve casos en niños de entre 1 y 6 años en el estado de Alabama, en Estados Unidos, que también dieron positivo en adenovirus.
El organismo europeo apunta que "por el momento se desconoce la causa exacta de la hepatitis en estos niños". Sin embargo, informan de que en Reino Unido, donde se han producido la mayoría de los casos hasta la fecha, se considera que "lo más probable es una causa infecciosa basándose en las características clínicas y epidemiológicas de los casos que se están investigando".
Asimismo, tampoco descartan una "posible exposición tóxica". Hasta el momento, no se ha identificado ninguna relación con la vacuna contra la covid-19, mientras que la información recogida a través de un cuestionario a los casos sobre alimentos, bebidas y hábitos personales "no ha permitido identificar ninguna exposición común".
"Las investigaciones toxicológicas están en curso, pero se considera más probable una etiología infecciosa dado el cuadro epidemiológico y las características clínicas de los casos", resume el ECDC.
Las investigaciones de laboratorio excluyeron los tipos de hepatitis viral A, B, C, D y E en todos los casos. De los 13 niños en Escocia de los que se dispone de información detallada, tres eran positivos en COVID-19, cinco negativos y dos habían tenido una infección en los tres meses anteriores. Once de estos 13 casos tenían resultados de pruebas de adenovirus y cinco resultaron positivos.
El 5 de abril, Reino Unido notificó un aumento de los casos de hepatitis aguda de etiología desconocida entre niños menores de 10 años previamente sanos de Escocia. Una semana después, Reino Unido informó de que, además de los casos de Escocia, había aproximadamente otros 61 casos en investigación en Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte, la mayoría de los cuales tenían entre 2 y 5 años. El 14 de abril, Escocia detalló que, de los 13 casos que se estaban investigando, cuatro estaban relacionados epidemiológicamente.
Los casos en el Reino Unido se presentaron clínicamente con hepatitis aguda grave, con niveles elevados de enzimas hepáticas [(aspartato transaminasa (AST) o alanina aminotransaminasa (ALT) superiores a 500 UI/L)] y muchos casos presentaban ictericia.
Algunos de los niños tenían síntomas gastrointestinales, como dolor abdominal, diarrea y vómitos en las semanas anteriores. La mayoría no tenían fiebre. Algunos niños requirieron atención en unidades hepáticas infantiles especializadas y unos pocos tuvieron que ser sometidos a un trasplante de hígado.