La escena se ha repetido ya en varias ocasiones, sobre todo por las noches y cuando llega el fin de semana, en el entorno de la plaza de La Antonia. Jóvenes amantes de la velocidad transitan por esta zona de Zabalgana con sus coches preparados realizando peligrosas maniobras, trompos incluidos, y alterando el descanso de los vecinos con el ruido de sus motores y derrapes.
Las carreras ilegales son un fenómeno en declive en Vitoria y prácticamente ya parte de la historia en este barrio de la ciudad, pero no son pocos los conductores que siguen aprovechando la amplitud de sus aceras, sus curvas y sus rotondas para conducir de forma temeraria. Y las imprudencias, en ocasiones, terminan pagándose.
Es lo que sucedió hace algo más de una semana precisamente en La Antonia, donde un coche que circulaba a toda velocidad por la plaza terminó empotrándose lateralmente contra otro vehículo que se encontraba aparcado junto a los concesionarios.
Derrape y colisión
Eran las 2.00 horas del pasado sábado 26 de enero cuando Pablo, pareja de la propietaria del coche afectado y vecino de Avenida del Mediterráneo, escuchó desde su propia cama el último derrape del vehículo accidentado y la colisión, según relata en conversación con DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA. Tras levantarse como un resorte y asomarse a la ventana, comprobó que el automóvil golpeado era el BMW familiar.
Lejos de quedarse en el lugar del choque, el conductor que había provocado el accidente dio marcha atrás, arrancó y se dio a la fuga, dejando en su precipitada huida un reguero de aceite y abandonando tanto el parachoques como la matrícula de su coche.
Finalmente, con la Policía Local pisándole los talones y la Ertzaintza ya en el lugar de los hechos, el joven se vio obligado a regresar y aceptar su culpa, tras lo que fue denunciado por la Policía autonómica.
Pese a no sufrir daños excesivamente graves a primera vista, el BMW fue declarado siniestro y todavía se encuentra a la espera de ser reparado en el taller.
La segunda vez
"Ya es la segunda vez que se empotran contra nuestro coche en esta zona. La otra vez fue hace dos años justo a la salida del semáforo hacia Avenida del Mediterráneo", recuerda este vecino. Pablo denuncia además que este tipo de hechos son más habituales de lo que parece y reclama más vigilancia.
Fuentes municipales consultadas por este periódico aseguran que la Policía Local "no tiene constancia" de que en esta zona se hagan carreras ilegales y explican que tampoco se han elaborado atestados de estas características recientemente.
Sin embargo, "de vez en cuando", sobre todo en polígonos industriales de la ciudad, sí se han detectado prácticas de este tipo, según los mismos medios. La última vez, en el parque industrial de Jundiz, lo cual motivó una importante intervención policial.
Fuera de Gasteiz, también se ha denunciado recientemente que estas prácticas son habituales en Montaña Alavesa y, un tiempo más atrás, se identificó por ejemplo a varios conductores en un polígono de Lantarón.
Medidas correctoras
Alain Larreina, portavoz del colectivo vecinal Zabalgana Batuz, recuerda por su parte que "hace un tiempo", allá por el año 2018, otro vehículo que –a priori– circulaba a gran velocidad acabó empotrado contra una tienda de mascotas ubicada también en la plaza de La Antonia.
Larreina describe que hace un tiempo las carreras eran habituales en las grandes avenidas de Zabalgana, pero que distintas medidas como la instalación de pivotes o la reducción de carriles para circular han minimizado –o directamente eliminado– estas prácticas con el paso del tiempo.