Navarra

Un cuarto encierro de fiestas de Tafalla corto y con cinco heridos por contusiones y raspazos

Los mismos toros de la ganadería Macua de Larraga han vuelto a protagonizar un encierro rápido y sin peligro
Cuarto encierro de las fiestas de Tafalla

Los primeros dos encierros en Tafalla dejaron heridos y cornadas. En el tercero hubo más calma y se produjo una carrera limpia. Y hoy, en el cuarto, protagonizado por los mismos toros de la ganadería Macua de Larraga, se ha repetido la misma dinámica: un encierro rápido y sin muchos incidentes, sin heridos por asta de toro. Ha sido una carrera rápida que ha durado poco más de dos minutos y en la que ha habido cinco personas que atendidas por contusiones y erosiones.

Antes del cohete de inicio, una decena de mozos ya estaba esperando en las puertas de los corrales, saltando con el periódico en mano, para iniciar la carrera. A las nueve en punto ha sonado el estruendo del cohete y el encierro ha comenzado veloz. Los morlacos han encabezado la salida de los corrales como si tuvieran prisa y tomando la iniciativa. Los cabestros, en esta ocasión, han seguido a los toros y enseguida se ha formado un pelotón unido. Algunos de los primeros mozos, tras correr unos metros, han abandonado la carrera apartándose hacia el vallado. Su cometido ya había sido cumplido: guiar a la manada en la salida del encierro. En la primera recta se han conformado dos grupos: adelante cinco toros muy veloces y atrás los cinco cabestros junto a un toro rezagado. No ha habido ningún incidente en este primer tramo, los mozos han podido disfrutar de unos metros bonitos al lado del ganado.

El susto del encierro ha llegado a la altura de curva de la Farola, la primera del recorrido. Los cinco toros que encabezaban la carrera han tomado unos metros de distancia entre ellos. Un mozo que corría con la mirada hacia atrás, intentando visualizar a los morlacos dispersos, ha perdido el equilibrio en plena curva y ha caído al suelo boca abajo con los brazos abiertos. Ha permanecido en el suelo unos diez segundos, con las manos en la cabeza. En ese lapso de tiempo un toro castaño le ha esquivado saltando por encima, con la suerte de no pisarle la cabeza. El resto de los astados han mirado al mozo tendido en el suelo pero sin hacer ningún amago, salvo alguno que se ha visto obligado a saltarle también. Cuando ha pasado toda la manada, el mozo se ha levantado hacia la valla acompañado de un amigo que acudió rápido.

También ha corrido en esta curva Aingeru Rodríguez, un estellés de 26 años habitual de los encierros de Tafalla. “Suelo correr en la curva de la Estación pero algún día me gusta bajar aquí. Como han sido los mismos toros que ayer, iban más parados y he podido hacer una buena carrera, mejor que los otros días”, ha declarado.

La recta hacia la estación de tren ha sido muy rápida. Los primeros cinco toros han llegado enseguida, provocando la caída de un corredor. A lo largo de la calle dos toros, uno negro y uno castaño, han cogido ventaja a sus hermanos. Les seguían un astado en solitario y unos metros más atrás los dos que habían completado el grupo desde el comienzo. Esto ha permitido que, al abrirse la manada, se hayan creado huecos para que los mozos protagonizasen bonitas carreras hasta la entrada a la plaza. Por atrás, con un ritmo mucho menor, corrían los cinco cabestros junto al toro rezagado. Acompañados de tres pastores que les han guiado durante el último tramo para acabar una carrera tranquila.

Los morlacos de Macua han vuelto a demostrar poca malicia y han desarrollado toda la carrera por el centro del recorrido, sin amenazar a los corredores. Ander Amorena, 27 años, natural de Pamplona y corredor habitual en los encierros de Tafalla, ha contado orgulloso que ha podido “hacer una carrera muy bonita. He empezado con la cabeza de la manda a la altura del puente y llegado con el último hasta la curva de la estación”.

Sin heridos por asta

El cuarto encierro en Tafalla no ha tenido peligro. Los corredores han podido disfrutar de una carrera limpia sin ninguna herida por asta de toro. Cinco personas han sido atendidas por contusiones y erosiones provocadas por caídas. Según el parte médico del equipo de la enfermería de la plaza de Toros de Tafalla, el pamplonés O.I. ha sufrido erosiones en ambos codos a la altura de la Farola al caer de frente con los brazos abiertos contra el asfalto.

Otros dos corredores fueron han sido atendidos en Martínez Espronceda, uno de ellos, S.M.P., de Olite, por una abrasión en mano derecha y golpe en la cabeza (solo un roce). Además, A.P.M. ha sufrido una herida contusa en la palma de la mano. Por último, otros dos mozos (R.O.A y R.O.M.) han sido asistidos en la Estación por erosiones.

Las calles de Tafalla acogerán durante el fin de semana los últimos encierros de las fiestas. Gorka Azpilicueta es corredor habitual, pero hoy ha decidido descansar para “poder disfrutar los que vienen. Quedan dos con toros grandes y serán encierros fuertes y muy bonitos, como suelen ser en Tafalla”.

Susto en el 4º encierro de fiestas de Tafalla: un mozo tropieza y los toros le pasan rozando Javier Iraola

19/08/2023