Un debut amargo

El grupo II de la Segunda RFEF esconde historias de navarros que viven el fútbol de otra manera, como estilo de vida. Julen Foncillas es un ejemplo. A sus 28 años se ha convertido en el entrenador más joven de los equipos de la categoría.

Tras la marcha de Bebeto, el último entrenador del San Juan, que consiguió el ascenso a Segunda RFEF y mantuvo la categoría durante dos temporadas consecutivas, Foncillas llega a dirigir el cuerpo técnico del San Juan con mucha ilusión. “El objetivo principal es salvar la categoría”, aseguró.

Foncillas no es un extraño en el club. No es alguien que venga con un currículum extenso en otras entidades. San Juan es su casa, equipo con el que ha jugado en Tercera división, hace ya algunos años. En 2021, concretamente en mayo, llegó a los cien partidos como jugador y ahora, tras colgar las botas, pasa a ser el entrenador, y el más joven de la categoría, además. Pero su juventud no es sinónimo de poca experiencia. Como comentó, “empecé a entrenar con 14 años, con chavales pequeños, y he pasado por todas las categorías”. A la hora de afrontar este reto, en un nivel de competición semiprofesional, tiene buenas sensaciones y confía en poder conseguir el objetivo. “Estoy seguro de que el trabajo va a dar sus frutos, el equipo tiene nivel”, declaró.

Su trayectoria parece tener un lazo estrecho con el club. Cuando Bebeto anunció que no seguiría esta temporada, Foncillas recibió la llamada. No le pilló de imprevisto. “Yo sabía que podía ser una de las opciones. Me dijeron que lo estaban valorando y a partir de ahí tuve mucha ilusión hasta que me dijeron que yo era la primera opción”. De alguna forma, el maestro le deja el testigo al alumno. Bebeto, figura histórica del San Juan, le entrenó durante dos años en Tercera División. Y como buen alumno, Foncillas adquirió algunas características de su maestro. Se considera un entrenador “cercano con los jugadores, que intenta preparar los partidos al máximo detalle y que se centra en las personas”.

El debut

El pasado domingo el San Juan disputó el primer partido de la temporada, y su entrenador debutó dirigiendo a los jugadores en Segunda RFEF. Se midieron ante el Barakaldo, un club de la localidad vizcaína, entrenado por Imanol de la Sota. El debut no fue el ideal. El equipo de Foncillas perdió por 6-0. Una forma difícil de empezar la temporada. “No es el mejor debut, ni mucho menos. Pero tengo confianza en los jugadores y en todo el equipo”, declaró.

Fue un encuentro difícil en el que el primer gol llegó en el minuto 2. Después del 3-0 el equipo quedó tocado y el resultado final fue muy abultado. “El tercer gol nos afectó mucho y nos vinimos abajo. Nos falto acierto”, afirmó. Sus sensaciones del partido fueron “negativas en cuanto al resultado, pero tenemos optimismo para el siguiente”.

Julen Foncillas, entrenador del San Juan. Unai Beroiz

Las aspiraciones del San Juan para esta temporada pasan por conseguir la permanencia en la Segunda RFEF, una categoría difícil en la que los pequeños detalles marcan la diferencia en el marcador. Para conseguir el objetivo existe una fórmula: “tenemos que ir partido a partido, competiendo cada vez mejor, ajustando cosas y mejorando”.

El próximo encuentro será el 9 de septiembre frente al Calahorra. Allí Foncillas debutará otra vez, en esta ocasión jugando en casa y con la posibilidad de cambiar la dinámica del primer partido. “Sabiendo quiénes somo y qué tenemos que hacer podremos conseguir un buen resultado”, finalizó.

Julen Foncillas es un entrenador de la casa, que conoce el equipo y el nivel alto de competición. A sus 28 años tiene una larga experiencia dirigiendo a jugadores. Conoce los terrenos de juego desde dentro y desde fuera, como futbolista y como entrenador. Y el próximo sábado tendrá la oportunidad de conseguir su primera victoria en la Segunda RFEF delante de su afición.