Un hombre enfermo de cáncer de laringe que desempeñó funciones de soldador y caldero en distintas empresas vascas reclama ahora 342.742 euros a estas compañías en las que habría trabajado sin las correspondientes medidas de prevención laboral.
Según informa la Asociación de Víctimas del Amianto en Euskadi (Asviamie) en una nota, el operario "manipuló o estuvo expuesto a fibras de amianto y humos de soldadura, entre otros tóxicos, sin las medidas de prevención que la legislación de la época exigía".
"Ni las grandes empresas, ni las subcontratas en las que trabajó le informaron del riesgo ni le dotaron de protección respiratoria ni otras medidas de seguridad e higiene", lamenta Asviamie, que justifica la cuantía de la indemnización solicitada por "las secuelas, el daño moral y la pérdida de calidad de vida" sufridos por el operario.
"Existe un amplio consenso científico acerca de los riesgos y consecuencias en la salud derivadas de la inhalación del cóctel combinado de fibras de amianto y humos de soldadura, hecho que convierte a los soldadores en una de las profesiones con mayor riesgo de padecer cáncer y enfermedades respiratorias de origen profesional, con índices superiores a los causados por el hábito tabáquico", recuerda este colectivo.
Por este motivo, Asviamie ha convocado una concentración para el próximo lunes ante el Palacio de Justicia de Donostia, durante la vista que tendrá lugar por estos hechos en el Juzgado de lo Social número 4 de la capital guipuzcoana.