Un excomisario de la policía requirió al directivo de Banca Privada d'Andorra (BPA) Joan Pau Miquel información bancaria "relativa al nacionalismo catalán", en concreto de los expresidents Artur Mas y Jordi Pujol y el exvicepresident Oriol Junqueras: "El Estado español está en guerra".
Así figura en una declaración de Miquel como testigo ante un juez de Andorra, en noviembre de 2017, en la causa de la denominada Operación Cataluña, en la que se investigan presuntas coacciones al BPA para que facilitara información de líderes independentistas durante el procés, a cuyo sumario ha tenido acceso Efe.
Miquel explicita ante el juez que los funcionarios de la llamada policía patriótica actuaban "como un grupo organizado" y que se presentaban "sistemáticamente como representantes del Estado español". En concreto, Miquel apunta a un encuentro en Madrid con el entonces comisario Marcelino Martín Blas -que se presentó como Félix-, que en aquel momento era adjunto de Eugenio Pino, responsable de la UDEF y número uno del Cuerpo Nacional de Policía.
En este encuentro, Martín Blas deslizó a una nota manuscrita a Miquel en la que ponía: "El Estado español está en guerra y le requiere información relativa al nacionalismo catalán, en especial de Mas, Jonquras -sic- y Pujol". A lo que Miquel le dijo que no tenía conocimiento de que estas personas tuvieran cuentas en Andorra, una frase a la que el comisario respondió advirtiéndole de que "no jugara" con el Estado y que el requerimiento podía ser "beneficioso" para ambas partes.
En otra declaracion, Miquel explica ante el juez que los policías, entre los que figura el entonces agregado de Interior en la embajada de España en Andorra Celestino Barroso, le ofrecieron parar el "hachazo" al Banco de Madrid, que iba a ser objeto de una investigación por parte del Banco de España.
"Es lo que él da a entender. Que estaba en su mano, que es algo que ellos controlan", asegura en su declaración, en la que no detalla, no obstante, qué le requería al directivo de BPA a cambio de parar la investigación. En otra de las declaraciones que figuran en el sumario, la secretaria del consejo de administración de BPA, Roser Castellón, también apunta que su marido recibió una llamada amenazante del antiguo agregado de Interior en la embajada en Andorra, Bonifacio Díez -al que se refiere como Boni-.
"Colaboren, si no las cosas no van a ir bien", asegura Castellón que fueron las palabras del antiguo agregado de Interior.