El fiscal republicano del estado estadounidense de Luisiana, Jeff Landry, logró bloquear una ayuda de 39 millones de dólares a una planta eléctrica de la localidad de Nueva Orleans contra futuras inundaciones por la negativa de las autoridades locales a aplicar una prohibición total del aborto.
Landry pidió el jueves a la Comisión de Bonos Estatales de Luisiana, encargada de aprobar la transferencia de fondos públicos en el territorio, bloquear la línea de crédito hasta que la alcaldesa demócrata de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, ordene aplicar las restricciones al aborto aprobadas recientemente en el estado.
La Comisión le dio la razón a Landry, votando a favor de parar las ayudas a siete de sus trece miembros -los otros seis votaron en contra-, recogen este sábado varios medios estadounidenses.
Totalmente prohibido
Abortar está totalmente prohibido en Luisiana a partir de la decimoquinta semana de embarazo, sin excepciones para el incesto o la violación.
Sin embargo, en la práctica, las autoridades de Nueva Orleans, la ciudad más grande del estado, han ordenado a las fuerzas de la ley no aplicar la norma, por lo que ni el fiscal ni la sheriff perseguirán a las clínicas abortivas ni a las personas que ayuden a mujeres a abortar, recoge el medio Politico.
La ley contra el aborto de Luisiana es una de las más restrictivas aprobadas en el país desde que el Tribunal Supremo estadounidense decidió revocar la protección constitucional de este derecho reproductivo con una polémica sentencia emitida a finales de junio de este año.