En los últimos años se han popularizado, en buena parte gracias a las redes sociales, gestos no verbales que han surgido para poder avisar, sin usar la voz, de que alguien está en peligro sin que el agresor se entere de que se le está delatando.
Es lo que ha sucedido con una adolescente en Carolina del Norte (Estados Unidos). La menor había sido secuestrada y pudo avisar de lo que le estaba sucediendo gracias a un gesto con las manos popularizado en TikTok y que pasó desapercibido para sus captores.
Sus padres habían denunciado su desaparición el 2 de noviembre en la localidad de Asheville, y dos días después fue vista dentro de un coche en una carretera de Kentucky. El piloto de la moto que iba a la par vio que la joven realizaba un gesto con las manos y dio aviso a la Policía, asegurando que la menor "parecía estar angustiada".
Poco después, la Policía localizó y detuvo al secuestrador, un hombre de 61 años llamado James Herbert Brick, de Carolina del Norte, mientras conducía por una carretera intesrestal de Kentucky, después de atravesar también con la joven prisionera los estados de Tennessee y Ohio.
El sencillo gesto que salvó a la menor
El gesto viral que la joven realizó y que ya ha evitado numerosas agresiones (y seguro que muertes) a lo largo del mundo consiste en doblar el pulgar y atraparlo con los otros cuatro dedos. Lo difundió en un vídeo la Fundación Canadiense de Mujeres y se hizo popular en TikTok durante el confinamiento de 2020 para que las víctimas de violencia machista pudieran alertar de su situación haciendo un gesto que no llamara la atención del agresor pero sí de las personas que pudieran verlas.