El Alavés afronta este sábado una nueva oportunidad para continuar en lo más alto de la tabla en la visita del Oviedo al feudo albiazul. No será una tarea sencilla ya que el conjunto carbayón ha agitado ya el árbol para enderezar su rumbo con la contratación de Álvaro Cervera, quien ha relegado en el banquillo a Bolo y debutó el pasado fin de semana con un triunfo ante el Málaga que le permite alejarse del descenso.
Además, en el choque ante el Oviedo, Luis García tendrá que mover ficha en el once tras la suspensión de Benavídez, que no disputará esta jornada tras acumular cinco amonestaciones.
La ausencia del pivote charrúa es una baja sensible para los intereses del cuadro albiazul ya que el centrocampista se ha erigido como una pieza inamovible en el eje del terreno de juego, donde ha aportado equilibrio entre líneas y, sobre todo, una capacidad asombrosa para recuperar balones y sacar el balón sin apuros.
Un aspecto que, sin embargo, ha lastrado a Benavídez en su adaptación al fútbol español es la elevada frecuencia con la que comete faltas. Y es que el centrocampista albiazul es el jugador de la categoría de plata que ha realizado más entradas que terminan en falta, con un total de 16.
Los relevos para el charrúa son escasos en las filas albiazules pero hay varias opciones con las que el Alavés puede minimizar su ausencia. Una de ellas es la apuesta por el canterano Balboa, que fue de la partida, por ejemplo, en la visita de Las Palmas y firmó una actuación convincente en la medular frenando la creatividad de Moleiro.
Apostar por la juventud del gasteiztarra sería algo arriesgado, pero a Luis García no le ha temblado el pulso a la hora de depositar la confianza en los canteranos. Su presencia puede ser lógica teniendo en cuenta los precedentes con Abqar y Abde, quienes hace pocos meses competían en Tercera RFEF y ahora lo hacen –en el caso del central marroquí, con nota– en la categoría de plata.
Otra opción es la de conformar un doble pivote integrado por Toni Moya y Salva Sevilla. El primero de ellos, que fue una de las gratas sorpresas del Glorioso en la última temporada, no arrancó el curso con los minutos esperados pero en las últimas jornadas ha vuelto a disfrutar de cierto protagonismo en el eje.
La dupla con el extremeño y el andaluz, además de aportar un cierto control del esférico, fue con la que el Alavés afrontó el choque ante el Albacete hace varias semanas en Mendizorroza. Así las cosas, Luis García tendrá que reajustar, una vez más, el once con el que tratará de regresar a la senda de la victoria en Mendizorroza, lugar en el que los últimos dos compromisos han concluido con un empate sin goles en el casillero.