Un joven palestino de 13 años ha sido identificado como el autor del ataque a tiros que ha dejado dos heridos graves este sábado en Jerusalén, y está recibiendo ahora mismo atención médica tras ser neutralizado por los disparos efectuados por dos civiles, según ha confirmado la Policía israelí, en un incidente ocurrido tras un atentado contra una sinagoga de Jerusalén Este que causó siete muertos la pasada noche.
Las fuerzas de seguridad israelíes dieron por muerto en un principio al joven palestino, pero una nueva actualización del recuento oficial indica que solo resultó herido y está recibiendo tratamiento médico, sin que hasta el momento hayan trascendido más noticias de su estado.
El ataque ha ocurrido en el barrio de Silwan, cerca de la Ciudad Vieja, y de momento están recibiendo tratamiento médico un padre y un hijo de 59 y unos 20 años respectivamente por heridas de bala por encima de la cintura, según han confirmado fuentes médicas y de seguridad al 'Times of Israel'.
A pesar de la gravedad de su estado, sus vidas no parecen correr peligro, según el Servicio de Emergencias de la ciudad. La Policía israelí ha indicado que el joven pertenecía a la Brigada de Paracaidistas del Ejército israelí y en ese momento se encontraba fuera de servicio.
Los dos civiles que dispararon al joven palestino llevaban licencia para portar armas y han recibido atención médica en el lugar del incidente, según la Policía israelí.
El ataque ha ocurrido tras la muerte de siete personas por los disparos de un palestino, posteriormente abatido por la Policía, contra los fieles próximos a la sinagoga de Neve Yaakov, en Jerusalén Este.