Nubes negras sobre Alegia. Ni rastro de sol, escondido, acobardado. "Hace dos semanas ni se me pasaba por la cabeza que iba a llegar a tiempo", dice Iñaki Artola. Quince días de oscuridad. Quince días de masticar pensamientos y preguntas. Quince días de incertidumbre, viajes al fisioterapeuta, conversaciones con Axier Arteaga, exprofesional y preparador del alegiarra. Quince días con el horizonte maltratado por la enésima lesión muscular, una molestia en el aductor de la pierna derecha, un cepo a la altura de la ingle. Un túnel horadado en horas de parón, en batallas sin luz ni taquígrafos, en ese rincón solitario del deportista de élite, abandonado por las cámaras y la miel de los frontones.
"Era un partido trampa", recuerda también Iñaki cuando el destino, el curro para recuperarse a tiempo y un 11-22 tremendo le avalan. Escapa del pozo. Escampa en territorio Artola con una victoria contundente en el Jaian Jai de Lekunberri. Y disipa dudas. Sobre todo, personales. Si bien en algunos desplazamientos notó este domingo cierta zozobra –siendo un manista con un tren inferior privilegiado–, le sirvió la "confianza" por encima de los mil entrenamientos para derrotar a un Joseba Ezkurdia que terminó desquiciado.
Ezkurdia 11
Artola 22
Duración: 45:40 minutos de juego.
Saques: 2 de Ezkurdia (tantos 2 y 5) y 5 de Artola (tantos 9, 12, 13, 18 y 22).
Pelotazos: 237 pelotazos a buena.
Tantos en juego: 6 de Ezkurdia y 9 de Artola.
Errores: 7 de Ezkurdia y 3 de Artola.
Marcador: 0-1, 0-3, 2-3, 2-6, 6-6, 7-6, 7-7, 8-7, 8-8, 8-10, 10-10, 10-20, 11-20 y 11-22.
Botilleros: Ejercieron de botilleros Mattin Ezkurdia (con su hermano Joseba) e Iker Iriarte (con Artola).
Apuestas: Se cantaron posturas de salida de 100 a 40 a favor de Ezkurdia.
Incidencias: Partido correspondiente a los octavos de final del Cuatro y Medio de Primera disputado en el frontón Jaian Jai de Lekunberri. Buena entrada. En el primer encuentro del festival, dentro del Cuatro y Medio Serie B, Exposito ganó a De la Fuente (22-20). En el tercero, disputado dentro del cinco por humedad en los cuadros traseros, Peio Etxeberria-Zabaleta vencieron a Altuna III-Martija (21-22).
Y de repente: sol rutilante sobre Alegia. Y de repente: el astro rey lanza una sonrisa a Iñaki como en los dibujos infantiles. Y de repente, cuando cantaban los artekaris posturas de 100 a 40 a favor de su rival, el de Baiko dio la vuelta a la tortilla con un ejercicio de autoridad que bien vale el billete a la liguilla de cuartos de final. Compartirá grupo con Altuna III –contra el que jugará el domingo en el Astelena de Eibar–, Jaka y Zubizarreta III.
La trampa de Ezkurdia
Y esa "trampa" a la que aludía el propio Artola cavó un pasadizo entre Alegia y Arbizu. Los nubarrones se trasladaron de un lado a otro. Las dudas y la responsabilidad se colgaron de las trabillas del pantalón blanco de Ezkurdia como las pesas de un hombre rana. Y no se repuso. En un escenario en el que, a priori, todos los factores parecían favorecer al tres veces campeón de la jaula –nunca había perdido en Lekunberri, había ganado siempre en el acotado a Artola y el rival aterrizaba con problemas físicos y sin entrenar–, llegó la derrota, más dolorosa aún por cómo se produjo, pues el de Sakana no fue competitivo.
Escoció mucho a Ezkurdia que en el diez iguales tuvo pelota para hacer el tanto y no acertó. Ese fue el principio del final. Ahí, en ese instante, comenzó a escribirse la historia de recuperación de Artola y a construirse el agujero para Joseba. El de Aspe rindió incómodo, tenso, inerme. No cruzó. Jugó recto. Artola aprovechó para darle velocidad y evitar el poder de Ezkurdia con la volea. La tormenta perfecta. Terremoto para las apuestas. Estuvo serio Iñaki. Suficiente. "Últimamente estoy bien, pero a la hora de jugar se me van los partidos", analiza el de Sakana, que terminó visiblemente decepcionado. Tormenta.