El otoño ya está aquí. Y con él llega el cambio de tiempo, la lluvia y el frío. Y también la necesidad de planificar aventuras eminentemente de interior. En los últimos años los escape rooms se han convertido en el principal reclamo de muchos turistas, que buscan un entretenimiento en familia o con amigos. Pero en esta ocasión vamos a redescubrir nuestros territorios a través de sus museos.
Y es que, además de los ya archiconocidos Guggenheim y Bellas Artes en Bilbao, Artium en Vitoria y Aquarium de Donostia, tenemos la posibilidad de redescubrir o incluso de encontrarnos por primera vez con la cultura, la historia o la ciencia en estos espacios en los que aprender y disfrutar a partes iguales.
A continuación podrás disfrutar de una selección de museos, en Araba, Gipuzkoa, Bizkaia y Navarra, con los que reconectar con los territorios a través de su patrimonio cultural.
Araba
Empezamos en Araba, donde tendremos la oportunidad de redescubrir parte de su historia a través de diferentes museos y entornos. De esta forma, recalaremos inicialmente en el Museo de Ciencias Naturales del territorio, que abrió sus puertas al público el mes de mayo de 1986. En estos momentos, y hasta el año que viene, además del extenso catálogo con el que cuenta, se podrá visitar la exposición temporal Infimum, que muestra al público “un mundo inadvertido por diminuto, por poco visible (u oculto) o por resultar demasiado rápido y fugaz, o desesperadamente lento, como para ser notado”.
Y de ahí ponemos rumbo al museo Fournier de naipes de Álava, que ofrece un recorrido histórico, técnico y temático que muestra la evolución de los naipes, desde el siglo XV hasta nuestros días. Asimismo, presenta una sección dedicada a las distintas técnicas empleadas a lo largo de la historia para la fabricación de cartas, algo que no podemos perdernos.
Conocer el recorrido de los naipes es posible.
Como tampoco podemos perdernos, ya fuera de la capital, el poblado de La Hoya (centro de interpretación que en Laguardia explica las características y vida cotidiana de este yacimiento arqueológico) y el taller museo Santxotena, que en Artziniega nos ofrece “una visita didáctica al génesis de la obra desde el laboratorio del volumen y la forma, hasta la abstracción simbólica”.
Bizkaia
A continuación ponemos rumbo a Bizkaia, con parada en museos de toda índole. De esta forma, efectuaremos una primera parada en el museo de reproducciones artísticas, uno de los museos más antiguos de la capital vizcaina, y en el que los visitantes tendrán la oportunidad de descubrir obras de los grandes clásicos de extraordinaria calidad cuyos originales se encuentran expuestos en los mejores museos de Europa.
Y, no muy lejos, nos encontramos con nuestra segunda parada, el museo de arqueología, que tal y como nos cuentan desde la Diputación de Bizkaia es un centro de referencia y canal difusor de las investigaciones arqueológicas del territorio a través de sus actividades destinadas a difundir el conocimiento de su historia, fomentar los estudios arqueológicos y garantizar el depósito, la conservación y la restauración de los materiales arqueológicos. “Su exposición permanente nos transporta desde los inicios de la vida humana en nuestro territorio, hace más de 100.000 años, hasta épocas históricas”, señalan.
El Itsasmuseum de Bilbao es ideal para conocer la villa.
Y si lo que nos interesa es el mar, siempre podemos recalar en el Itsasmuseum, donde descubrir la historia marinera de Bilbao, sus lazos con el surf... Un deporte que sigue cobrando fuerza, como siempre la ha tenido el Athletic, cuyo museo visitaremos a continuación. Desde los orígenes, hasta la actualidad, podremos descubrir la historia de San Mamés y de este club.
Gipuzkoa
En territorio guipuzcoano nos encontraremos a continuación, para de esta forma dar vida a su historia a través de la moda, el arte y sus trenes. En primer lugar ponemos rumbo al museo vasco del ferrocarril, que presenta una de las mejores colecciones ferroviarias de toda Europa, con vehículos de todo tipo: desde locomotoras de vapor, diesel y eléctricas, hasta automotores y diversas clases de vagones.
Y, aunque no lo hagamos en tren, nos encaminamos al museo San Telmo, cuya exposición permanente se centra en la evolución del hombre en la sociedad, y mirándola desde una perspectiva interdisciplinar, “nos ofrece una reflexión sobre el pasado cultural e histórico, como parte del crecimiento de la sociedad actual”, cuentan.
El museo del ferrocarril es todo un reclamo del territorio.
Pero, al hablar de sociedad, no podemos obviar la moda, esa que podremos recorrer en el museo de Cristóbal Balenciaga a través de sus diseños que han pasado a ser obras de arte, como las que también podemos encontrar, más al aire libre, en Chillida Leku en forma de esculturas.
Navarra
Y, finalmente, cambiamos de comunidad autónoma para poner rumbo a Navarra, donde nos esperan gastronomía, historia y supersticiones. Y es que en primer lugar nos encaminaremos al museo de la trufa, que se encuentra al abrigo de la sierra de Santiago de Lokiz, en plena comarca de Tierra Estella. Se trata de un centro dedicado a dar a conocer el estimado hongo conocido como el diamante negro de la cocina.
Muchos visitantes se acercan al museo de la trufa.
Y, para profundizar en nuestra historia, ligada a la Inquisición y a los juicios por brujería, ponemos rumbo a Zugarramurdi, donde nos espera el museo de las brujas, donde conoceremos el proceso inquisitorial que vivió Zugarramurdi en el S. XVII a través de audiovisuales, escenografías y pantallas interactivas, con visita obligada, por supuesto, a la cueva.
Como de historia va la cosa, tampoco podemos obviar el museo etnográfico del reino de Pamplona, un centro cargado de historia que abrió su exposición al público en la localidad navarra de Berrioplano en el año 1964, por iniciativa del escultor Joxe Ulibarrena Arellano. Fallecido el 20 de abril de 2020 a los 96 años, su familia sigue adelante con el proyecto museológico y las actividades de este espacio abierto al público gracias a la colaboración del Gobierno de Navarra.
Finalmente, cerramos este tour museístico en Pamplona, donde nos espera el Museo de Navarra, un servicio público del Gobierno de Navarra encuadrado en la Dirección General de Cultura-Institución Príncipe de Viana, cuyo objetivo principal es acercar el patrimonio y la historia de la cultura de la Comunidad Foral a todo tipo de personas. “Las piezas expuestas constituyen una interesante muestra del rico y singular patrimonio navarro desde la Prehistoria hasta el siglo XXI. Además, ofrece un amplio programa cultural que se desarrolla en sus salas de exposición temporal, salón de actos, talleres, etc.”, cuentan desde este espacio, en una visita que no podemos perdernos.